Según estudio socio-económico, el Metro le ahorrará a la sociedad bogotana 49 billones de pesos a 2050

Publicado:
27
Feb
2015
Escucha la noticia

Con la construcción y entrada en operación de la Primera Línea del Metro de Bogotá (PMLB), los ciudadanos ahorrarán en los tiempos de viaje, se reducirán las enfermedades por la contaminación ambiental, caerán las muertes por accidentes de tránsito y bajarán las tasas por hurto y homicidios, según lo concluye la evaluación para determinar los beneficios sociales y la rentabilidad del proyecto.

Durante los primeros años de operación del Metro de Bogotá (2021-2050), los ciudadanos tendrán más tiempo para destinar a otras actividades como resultado de una disminución del 18% en los tiempos de viaje, lo que representa un beneficio social de $49,6 billones. Esto quiere decir que el Metro generará variaciones en los tiempos de viaje de los usuarios de todos los modos de transporte.

En el año 2021, el tiempo ahorrado por la entrada en operación de la PLMB será de 15,11 minutos, el cual va a ir mejorando hasta el punto que en el año 2050 será de 27,44 minutos, la disminución.

El estudio del IDU concluye que el Metro es un proyecto socialmente rentable para la ciudad y que los ciudadanos están dispuestos a financiar una solución de transporte contundente y a largo plazo. Asimismo, la comunidad tiene claridad que al tratarse de un Metro subterráneo, entra en operación un sistema en la ciudad con alta capacidad y altos niveles de servicio.

Sobre las muertes en accidentes de tránsito, se advierte una disminución cercana al 28%, lo que equivale en términos monetarios a un beneficio de $670 mil millones. Por otra parte, en el área de influencia de la PLMB, se esperan reducciones del 30% en los delitos de alto impacto (homicidios y hurtos) valorados en $130 mil millones.

Relación Beneficio-Costo en el bienestar de los ciudadanos
El estudio indica que por cada peso invertido en el Metro de Bogotá se obtendrá un incremento en el bienestar para los ciudadanos de cinco veces la inversión realizada.

De no construir el Metro, los ciudadanos tendrían mayores gastos por transportarse; aumentaría el valor total de las toneladas de CO2 (dióxido de carbono) por incrementarse la emisión de gases efecto invernadero y se acentuarían los costos de los otros daños asociados (accidentalidad vial, congestión, enfermedades respiratorias, estomacales y de piel, inseguridad, informalidad comercial); es decir, los beneficios estimados con el Metro en operación se convierten en pérdidas para la sociedad, si este no se construye.