En la actualidad, pequeñas y medianas empresas piensan que la marca registrada es algo que no necesitan por ser exclusivo de grandes compañías, que se trata de un trámite caro y que supone un dinero mal invertido. Este pensamiento en la mayoría de los casos se produce por desconocimiento, mala información o falta de interés.
Conozca estos sencillos ejemplos y claros motivos por los que registrar la marca es una asequible clave de éxito empresarial independientemente del tamaño de la compañía.
Ejemplo de éxito
Debemos tener claro que en la empresa lo que funciona, funciona, y lo hace independientemente del tamaño o de si se es una personalidad física o jurídica. El ejemplo de la compañía de minúsculo origen Apple Inc., y el valor actual de la imagen de su mordida manzana suele ayudar a ponerse en situación.
Dada su popularidad, es fácil entender que sus marcas son un gran activo que prevalece y crece con el tiempo por dos motivos: Desde el inicio realizaron el registro de sus marcas transformándolos en derechos exclusivos y cumplen con una promesa y filosofía de marca por los que la gente está dispuesta a pagar más.
Supuestos prácticos
Suponga que un grupo de jóvenes con talento crea una pequeña empresa en la que invierten sus ahorros, tiempo y esfuerzo; logran un buen desarrollo, lo muestran en la web, consigien notoriedad y algunos buenos contactos con los que generan ingresos.
Suponga también que la personalidad jurídica que usan los jóvenes para materializar su proyecto se llama 'Methaproject S.L, y su primer desarrollo exitoso se conoce y comercializa como METHA. Un buen día, reciben un correo electrónico certificado con un requerimiento en el que una sociedad llamada 'Methaproject Desarrollos Informáticos S.A.', la cual desconocen, les ¨invita¨, a través de sus abogados, a cesar el uso de la denominación METHA con la que identifican sus productos y servicios, así como su dominio y razón social, por ser poseedores de varios derechos anteriores de marca o emprenderán acciones legales en su contra.
Los jóvenes emprendedores lo tienen en cuenta, y deciden contactar con expertos. Los profesionales consultados les aconsejan ceder, negociar un plazo para evitar la demanda y dejar de utilizar esa denominación, aclaran que el caso está difícil por la existencia de un derecho consolidado anterior y que las consecuencias pueden ser nefastas.No es difícil imaginar las consecuencias: El tiempo y dinero dedicado además del esfuerzo de tener que cambiar de imagen, de razón social, su publicidad, en incluso su nombre de dominio.Usando el mismo supuesto de los jóvenes emprendedores, imagine que su plan de negocio funciona muy bien y una compañía importante decide absorberlos, lo que para ellos es más que interesante. Lógicamente la gran compañía emplea auditorias para cuantificar la empresa.
Estas dos situaciones que pueden parecer extremistas o exageradas se dan habitualmente y pueden evitarse con un solo registro de marca.
La importancia del registro de marca
El costo de hacer un registro de marca, ya sea para proteger la imagen corporativa o identificar productos o servicios son cómodos, es garantía de empezar con buen pie su proyecto y, en cualquier caso, un dinero bien invertido en la adquisición de un importante activo intangible.
Por este motivo, antes de iniciar cualquier actividad empresarial, o si ya se encuentra inmerso en ella, debe poner atención a la denominación con que se identifica. Sabido esto, conviene tener claros algunos conceptos útiles en la toma de decisiones acertadas al respecto:
Quien primero solicita un registro de marca, gana. Por eso, antes de iniciar un registro se recomienda una investigación previa en la que se detecten y evalúen qué antecedentes existen. Esto se conoce como estudio de viabilidad de marca.
Las marcas se protegen para una actividad o producto concreto. Para clasificar estas actividades o productos se utiliza la 'Clasificación de Niza'. Debe enclavarse correctamente una marca en uno o varios de estos epígrafes para obtener una protección adecuada.
El registro de marca se concede por 10 años renovables por igual periodo tantas veces como se requiera.