El alcalde Mayor de Bogotá, Gustavo Petro, inspeccionó la zona donde se presentó un deslizamiento en el relleno sanitario Doña Juana y las obras que adelanta el operador para mitigar la situación y evitar afectaciones de salud de los vecinos del sector.
“Tenemos una situación de desplome de la parte superior hacia abajo, una de las ventajas es que representa más o menos la mitad de lo que fue el desplome del 97, otra ventaja que se ha tenido es que se restringe exclusivamente al relleno, no hay afectación sobre cuerpos de agua, y ahora empieza un trabajo que tiene un tiempo límite que no puede sobrepasar el área de contingencia, del llenado del área de contingencia”, afirmó el mandatario capitalino.
Señaló que la velocidad con que avancen las obras que adelanta el operador del relleno para controlar la situación va a ser supervisadas por el Distrito ya que no puede superar el tiempo de vida útil del área de contingencia que hoy permite que la disposición final de residuos se adelante con normalidad.
“En este momento hay un área de contingencia que nos permite que la operación de aseo se realice normalmente y esperamos que esa área que tiene una capacidad de tres meses resista en el tiempo, tiempo que tenemos que utilizar para arreglar los daños del desplome y adecuar esta zona a la captación de residuos”, indicó el burgomaestre.
Con relación al tema de salud, el alcalde Petro sostuvo que la situación provoca salidas esporádicas de gas metano que es lo que produce malos olores y la Secretaría de Salud se encuentra monitoreando cualquier afectación que puedan tener las personas que viven en el sector aledaño al relleno.
“Nuestros equipos deben mitigar al máximo las afectaciones de salud, aquí se está haciendo algún tipo de operación manual para evitar moscos y otros vectores que aparecen en estos fenómenos, vamos a examinar con Secretaría de Salud, la potencia que tiene la mitigación, de tal manera que el objetivo prioritario hoy es disminuir los riesgos de salud de la población vecina”, expresó Petro Urrego.
Reiteró, que situaciones como estas dejan como lección que los rellenos sanitarios se deben acabar. “Los rellenos que están emitiendo gas metano, que es el peor gas efecto invernadero del planeta, deben acabarse y la manera de terminar con ellos es el aprovechamiento, es decir el programa de Basura Cero”, dijo.
El mandatario estuvo acompañado del director del Instituto Distrital de Gestión de Riesgos y Cambio Climático (IDIGER), Javier Pava, quien manifestó que para la administración es fundamental la atención de la población y que se mantenga la continuidad de la disposición final de los residuos en la ciudad.
“De este plan de contingencia se deriva un cronograma y unas actividades que están a cargo del operador, hay una interventoría que va hacerle seguimiento y la UAESP también va estar al frente del tema y vamos a tener un comité permanente para hacerle seguimiento donde tenemos que garantizar en un plazo muy corto que se termine ese plan y garanticemos que no vamos a tener en riesgo en ningún momento”, aseveró Pava.
Resaltó que el alcalde Gustavo Petro ha dado instrucciones muy concretas a los equipos de salud para brindar atención prioritaria a todo el sector aledaño con el fin de brindarles una atención directa a las familias que se puedan ver afectadas.
“El operador del relleno tiene un plan que va desarrollar en la zona de influencia lo que vamos a ampliar es la prevención desde la Secretaría de Salud con el Hospital de Vista Hermosa. El Secretario de Salud ha dispuesto todos los equipos para reducir al máximo los impactos, vamos a hacer igualmente con la Secretaría de Ambiente un monitoreo en el tema de olores para tomar las medidas del caso”, afirmó el director del IDIGER.
Por último, Pava señaló que desde el Puesto de Mando Unificado instalado en el relleno de manera permanente, se han adelantado acciones inmediatas como fumigaciones.
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