Luego de cumplirse tres meses de restricción al consumo y expendio de bebidas alcohólicas en la UPZ 80 donde se incluye la Central de Abastos Corabastos en la localidad de Kennedy, la Administración Distrital decidió no prolongar la medida gracias a la importante mejoría en los principales indicadores de seguridad y a los compromisos adquiridos por comerciantes de la zona.
En el tiempo que estuvo vigente la restricción, la Alcaldía de Enrique Peñalosa sostuvo permanentes reuniones con los dueños de bares y sitios de expendio y consumo de bebidas alcohólicas, en la que finalmente los comerciantes se comprometieron a trabajar de forma coordinada con las autoridades, para hacerle frente a las conductas delictivas que se generen en esta zona y a las problemáticas de convivencia.
Entre otros de los compromisos de los comerciantes se encuentra la instalación de iluminación adecuada y cámaras de videovigilancia al interior de sus establecimientos. Además ayudarán al control del espacio público, facilitando los controles por parte de las autoridades y colaborarán denunciando cualquier hecho que pueda poner en riesgo la seguridad de la comunidad.
Para llegar a estos acuerdos, también se generaron reuniones entre los comerciantes y los habitantes de la zona, quienes habían interpuesto una acción popular pidiendo la intervención del distrito.
Sin embargo, la Alcaldía de Bogotá aclaró que al interior de la Central de Abastos de Bogotá, no está permitido el consumo de alcohol, como lo establece el Plan de Ordenamiento Territorial POT y recordó que habrá rigurosos controles para garantizar el cumplimiento de esta norma.
Durante dos meses, la Secretaría de Seguridad, Convivencia y Justicia en articulación con la Policía Metropolitana de Bogotá, verificará el comportamiento en materia de seguridad y convivencia de la UPZ 80 Corabastos y no descarta que se puedan tomar futuras medidas en el sector en caso que aumenten los delitos asociados al consumo de licor.
Resultados:
La Ley seca decretada en la UPZ Corabastos desde el pasado 13 de diciembre de 2018, logró la reducción del 50% de homicidios en comparación a tres meses antes de entrar en rigor la medida.
Así mismo se redujeron las lesiones personales en 63%, las riñas en 13%, el hurto a comercio en 67%, el hurto a automotores en 50% y el hurto a motocicletas en 43%.
En cuanto a comparendos por infringir el Código de Policía, las autoridades impusieron 1.648 multas antes de implementarse el decreto de Ley Seca, y durante la medida, 1.567, es decir un 5% menos.
