En los últimos días se produjo el florecimiento en el Jardín Botánico de la enigmática planta hermafrodita del corazón púrpura, cuyo nombre científico es Aristolochia grandiflora.
Esta especie hace parte de la colección de plantas vivas del Jardín Botánico y es nativa de Centroamérica, la región Caribe y Colombia. Su flor es considerada como la más grande entre sus especies, cuyo ciclo de vida solo dura dos días luego de florecer y emite un particular olor a carne en descomposición.
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La flor de corazón púrpura o también conocida como zaragoza o gallito, le debe su nombre su forma que simula un corazón de gran tamaño y de color púrpura oscuro, cuyo olor seduce y atrae a algunas presas como mariposas u otros insectos que le permiten cumplir su función polinizadora.
El típico olor a carne en descomposición atrae en especial a insectos como las moscas, que luego quedan atrapadas en el interior de la flor y de esta manera la planta retiene el polen de otras flores que los insectos llevan adherido a su cuerpo, para seguir su ciclo reproductivo.
Al segundo día la planta entra en su fase masculina, es decir que vuelve a abrir su flor para que las moscas puedan salir a encontrar otras flores en fase femenina que puedan ser polinizadas y fertilizadas para propagar la especie. Luego de ello se marchita.
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Para los científicos del Jardín Botánico, el florecimiento de la capitana de corazón púrpura es un evento digno de registrar y documentar, debido a que además de ser una de las flores más grandes de América Central, aún se considera como una especie misteriosa que ha sido utilizada en la medicina, como fuente de alimento y fines ornamentales.
