Este es el predio donde estará el patio taller del Metro de Bogotá

Está ubicado en el sur de Bogotá, cerca de varios importantes barrios de Bosa. Por ahora, antes de que se construya lo que será el ‘parqueadero’ del Metro, está siendo resguardado para protegerlo de posibles invasores.

Así lo confirmó la Empresa Metro de Bogotá, que explicó además que el predio donde se construirá el patio taller está localizado en el barrio El Corzo, localidad de Bosa. Actualmente ese predio es propiedad de la empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá.



Esa entidad tiene un guardabosques y un protocolo de vigilancia y seguridad que impide que estos terrenos resulten invadidos para construcción ilegal de vivienda.

Una vez la Empresa Metro de Bogotá adquiera los predios, será una zona de obra con protocolos similares para seguir resguardando el espacio.

Pero, ¿por qué el patio taller ya no será en Mosquera? Según explicó Metro de Bogotá, la longitud del ramal hasta el patio taller es determinante de los costos de operación de los trenes. Esto directamente afectará el valor que tengan que pagar los ciudadanos: acortar su longitud también servirá para reducir la presión sobre las tarifas que cobrará el metro a sus usuarios.

Lea en El Tiempo: ¿Qué hay en el terreno escogido como patio taller para el metro?

La decisión de escoger esta ubicación, cerca a Ciudadela Porvenir, la tomó la Comisión Intersectorial de Infraestructura y Proyectos Estratégicos  (liderada por el presidente Juan Manuel Santos) dado su menor longitud de ramal técnico, su menor costo estimado, y los menores riesgos jurídicos en cuanto a la modificación del uso del suelo.

Lo más importante es que esta solución representa un ahorro del orden de los $345.000 millones, según un estudio contratado por la empresa Metro y la Financiera de Desarrollo Nacional, concluido dos meses atrás.

Este estudio hizo una comparación frente a la propuesta del año 2015 de situarlo en el sector de Bosa 37, a una distancia de 5.6 kilómetros de la última estación de pasajeros, lo que significaba que los trenes rodarían esa distancia sin llevar pasajeros y con el desgaste correspondiente de las máquinas, que en total serian 11 kilómetros al día sin uso.