La Secretaría de Educación del Distrito realizó pruebas en cinco colegios oficiales de la ciudad para escuchar la opinión de las y los beneficiarios del Programa de Alimentación Escolar - PAE. El objetivo es seleccionar productos nutritivos y deliciosos para las niñas, niños y jóvenes, con el fin de vincularlos a la oferta de refrigerios escolares del siguiente año.
De esta manera, la Secretaría de Educación del Distrito pone la opinión de los estudiantes en primer lugar y los involucra en el proceso de selección de los alimentos que se les brindarán el otro año.
Estas pruebas sensoriales, lideradas por la Dirección de Bienestar Estudiantil, se han venido realizando entre los meses de abril y mayo en colegios públicos de varias localidades de la ciudad. Además, han involucrado a aproximadamente a 900 estudiantes de diferentes grados con el objetivo de escuchar su voz y hacerlos participes de la planeación del PAE, con el fin de continuar ofreciendo la mejor alimentación escolar del país.
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En el ejercicio participaron 12 empresas, de las cuales ocho son nuevas, incluidas microempresas, que aportaron productos que cumplen con la normatividad vigente en términos sanitarios y nutricionales. Ahora, de acuerdo con los resultados de las pruebas se determinará cuáles se pueden vincular a la oferta del PAE el siguiente año escolar.
A continuación te compartimos una imagen de las y los estudiantes durante la jornada:
“Me parece fundamental esto porque se está teniendo en cuenta la voz de nuestros niños y ellos están sintiendo que su opinión es importante. Estoy muy contenta de que se les pregunte qué les gusta y qué no les gusta porque en últimas son ellos los beneficiarios. Nadie se va a comer algo que no le gusta, así que esta actividad es clave para que ellos disfruten de su refrigerio y sientan agrado por la comida que les brinda la Secretaría de Educación”, agregó Luisa Fernanda Gantiva, mamá de uno de los estudiantes.
Algunos de los productos que degustaron las y los estudiantes fueron mezclas de frutos secos como maní, maíz tostado, almendras, arándanos, mango deshidratado, semilla calabaza, marañón y banano deshidratado.
A Roma Isabela Rivera, estudiante de grado quinto del colegio Rafael Uribe Uribe, le gustaron los cereales “porque tenían un sabor muy rico, eran una buena combinación y sabía riquísimo”, pero no le convencieron mucho los trozos de banano que venían junto con un maní.
Mientras tanto a Esteban Rusinque, de grado cuarto, le encantó el yogurt “porque es lo que siempre me dan en mi casa, son mis onces favoritas y me gustó mucho como sabía”.
También probaron galletas de avena - miel - ajonjolí, galletas de avena- manzana- maní, maní recubierto, granola en hojuelas, yogurt de búfala, bebida de naranja-zanahoria, bebida de banano-mora-remolacha, bebida de apio-kiwi-pera, bebida de piña-naranja-pera-pepino, arroz con leche, tume, bocadillo de coco, entre otros.
