Las clases en los colegios públicos de Bogotá se iniciaron de manera no presencial el 25 de enero y desde esta fecha, las niñas, niños y jóvenes disfrutan del Programa de Alimentación Escolar: una prioridad del Gobierno Distrital para garantizar su bienestar durante el desarrollo de las clases en el hogar y aportar así a la prevención de la deserción y la desnutrición.
El Programa de Alimentación Escolar en Bogotá comenzó desde el inicio del calendario escolar con la entrega de canastas en las zonas rurales y la validación de la información por parte de los padres o acudientes para reclamar los bonos, tal y como se desarrolló el año pasado.
La entrega de los apoyos alimentarios para los estudiantes de colegios oficiales de la capital comenzó con el reagendamiento para la entrega de bonos a las familias que, por alguna dificultad, no pudieron redimirlos al cierre de 2020.
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Asimismo, se cumple con la validación de la información y renovación de matrícula por parte de los padres o acudientes de estudiantes para el agendamiento de los bonos escolares y con la distribución de canastas de alimentos en las zonas rurales.
A través de estas modalidades transitorias que se implementaron desde el inicio de la emergencia sanitaria por COVID-19 y a lo largo de todo el calendario escolar, durante 2020 el Distrito entregó cerca de 6 millones de apoyos alimentarios (entre bonos y canastas) con una inversión superior a los 420 mil millones de pesos que se financiaron fundamentalmente con recursos propios del Distrito (en un 91 %).
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La entrega de bonos canjeables y canastas alimentarias continuará en 2021, tanto para los estudiantes de colegios oficiales que siguen sus actividades académicas en los hogares a través de la estrategia ‘Aprende en casa’, como para las niñas, niños y jóvenes que regresan a clases presenciales a partir del 15 de febrero a través del Plan de Reapertura Gradual, Progresiva y Segura R – GPS en los colegios públicos.
La secretaria de Educación del Distrito, Edna Bonilla Sebá, enfatizó que “en la medida en la que se vayan valorando e implementando los protocolos para el retorno gradual, progresivo y seguro de nuestras niñas, niños, adolescentes y jóvenes a las aulas, se transitará de manera gradual la operación del Programa de Alimentación Escolar a las modalidades regulares de operación definidas en la Resolución 29452 de 2017. Es decir, refrigerios escolares y el servicio integral de desayunos y almuerzos escolares”.
Para este año, el bono alimentario tiene un valor de $50.000 mensuales, conforme a lo definido por la Resolución 006 y 007 de la Unidad Administrativa Especial de Alimentación Escolar – ‘Alimentos para aprender’ del Ministerio de Educación Nacional. Por lo anterior, el primer bono de alimentación escolar tiene un valor de $62.500, ya que comprende una semana del mes de enero y el mes de febrero.
Los estudiantes que contaron con apoyo alimentario el año anterior e hIcieron la respectiva renovación de la matrícula para el año escolar 2021, no deben realizar ningún tipo de inscripción para recibir el beneficio este año.
Para las niñas, niños y jóvenes nuevos en el sistema educativo oficial, la Secretaría de Educación indagó a las familias sobre la necesidad de recibir este apoyo en el formulario de aceptación de cupo y novedad de matrícula y su validación está actualmente en curso.
“Las modalidades de bonos y canastas alimentarias fueron muy bien evaluadas por los padres y acudientes en 2020, lo que permitió a su vez incrementar en un 8 % los estudiantes beneficiarios. Por eso, garantizamos su continuidad mientras avanza la reapertura gradual, progresiva y segura de nuestros colegios”, concluyó la Secretaria de Educación al destacar la particular relevancia que tiene la alimentación escolar en el acceso y la permanencia de las niñas, niños y jóvenes en el sistema educativo.
