En Bogotá hay 700.000 personas mayores de 65 años que no cuentan con una pensión para su vejez y la mitad de aquellas que sí lograron pensionarse, apenas recibe un salario mínimo.
Por esta preocupación, de raíces profundas, el Consejo Distrital de Sabios y Sabias, que se reunió el viernes 4 de diciembre, en el salón Huitaca de la Alcaldía Mayor de Bogotá, le sugirió a la alcaldesa una propuesta que daría un giro de 180 grados a la política de vejez en la ciudad y cambiaría en su defecto sus condiciones y derechos en la ciudad: una pensión social no contributiva a las personas mayores de 65 años.
“A esa edad es mucho lo que se le ha dado a un país y eso es lo mínimo que merecemos”, sostuvo María Conchita Fernanda Ramírez, la Coordinadora General del Consejo Distrital de Sabios y Sabias, quien reconoce la importancia de la agenda y las acciones presentadas por parte de la Secretaría de Integración Social frente a las acciones solidarias, los apoyos económicos, atención de centros día, centros noche y centros de protección social para las personas mayores.
“De un millón cien mil personas mayores en la ciudad, 700 mil no tienen pensión y de los pensionados un 50 por ciento recibe un sueldo mínimo; los restantes, se mantienen con una tiendita, del arriendo de una pieza o dependen directamente de sus hijos, y muchos ejercen las ventas informales en las calles”, afirma la consejera, que resaltó el papel de los sabios y sabias, que son un modelo de organización en América Latina.
El Consejo Distrital de Sabios y Sabias, que tuvo su octava asamblea esta semana y cumplió cinco años de convertirse en un órgano consultivo con un representante-consejero - por cada una de las veinte localidades que integran la ciudad, es una instancia orientadora e incluso de soporte técnico de la política pública de vejez, la cual se desarrolla desde la Secretaría Distrital de Integración Social.
Ventanillas exclusivas para mejorar la calidad de atención, línea de atención telefónica diferencial, la asignación de citas prioritarias con geriatría, gerontología y psicología y fortalecer e incentivar las redes de cuidado que facilitan prevenir y atender las violencias hacia los mayores, son algunas de las trece propuestas hechas por el Consejo de Sabios y Sabias para mejorar la calidad de vida y el bienestar de las personas mayores.
Para avanzar en ese sentido, según la Directora de Integración Social, Xinia Navarro, se dinamizará la creación de redes de cuidado comunitario en las veinte localidades entre personas mayores y actores del territorio que promuevan la asociación, el acompañamiento y la vinculación a proceso de arte, cultura, recreación y hábitos saludables. “Son veinte redes de cuidado comunitario con un proceso de participación de 5000 personas del territorio en las veinte localidades de Bogotá”, concluyó la funcionaria distrital.
