La Secretaría Distrital de Movilidad (SDM) puso al servicio la zona de cargue y descargue de mercancías en el centro de distribución de productos químicos más importante de la ciudad como es la carrera 63 entre calles 9 y 5A, en la localidad de Puente Aranda.
“Esta zona de cargue y descargue aumenta la productividad de las empresas de químicos, organiza la actividad logística en el sector, mejora el tránsito y disminuye la congestión asociada con la circulación de vehículos de carga”, señaló el secretario de Movilidad, Felipe Ramírez.
La zona de cargue y descargue en el sector de químicos en Puente Aranda se implementó, luego de diversas pruebas piloto, como una alternativa técnicamente viable a los problemas generados por unas operaciones de cargue y descargue desordenadas. La señalización ofrece capacidad para atender hasta 15 vehículos de carga de dos ejes simultáneamente.
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La nueva zona para el cargue y descargue de mercancías se puso al servicio en el costado oriental de la carrera 63 entre la avenida de las Américas y la calle 5A.
De manera adicional se realizó un cambio de sentido vial sobre la carrera 63, pasando de tener doble sentido a ser una sola vía en sentido sur- norte, lo que facilita los desplazamientos de la comunidad y fortalece la seguridad vial en el sector.
Actualmente Bogotá tiene implementadas 143 zonas de cargue y descargue con más de 200 cupos asignados para abastecer la ciudad de forma cómoda y eficiente. La localización de estas zonas está disponible en: https://www.simur.gov.co/mapa-de-zonas-carga.
Aquí, un trino de la Secretaría de Movilidad sobre la implementación de la zona de cargue y descargue en la localidad de Puente Aranda:
⚠️🟢🚚Hoy entró en operación la zona de cargue y descargue en el sector de químicos de @PuenteAranda_, una iniciativa que beneficia a empresarios y a los habitantes de la localidad, permitiendo una operación logística eficiente, organizada, segura y sostenible. 👏 pic.twitter.com/1ThEcInvog
— Movilidad Bogotá (@SectorMovilidad) June 30, 2022
Compromisos por las buenas prácticas
Los empresarios del sector de químicos, donde se ubica la zona de cargue y descargue, se comprometieron con el ejercicio de buenas prácticas para el uso de estos espacios con el fin de apostarle a una logística urbana eficiente, segura y sostenible. Entre estas prácticas están:
- No generar ruido.
- No dejar desechos en vías, andenes y demás espacio público.
- Monitorear los horarios de descanso de los conductores.
- Promover hábitos y rutinas saludables de descanso.
- Fortalecer los controles al cumplimiento de los límites de velocidad.
- Realizar rutinas de mantenimiento preventivo y correctivo en los casos que se presente para garantizar la confiabilidad de la flota.
- Programar la recepción de mercancías en horas valle para aportar a la movilidad de la ciudad.
- Planear la llegada no simultánea de los vehículos garantizando el espacio para el almacenamiento de mercancías y los despachos a tiempo para evitar el estacionamiento prolongado de vehículos de carga.
- Respetar la señalización implementada.
- Promover la convivencia respetuosa y armónica con los residentes del sector.
Marcación de puntos ciegos en vehículos de carga
La puesta en marcha de la zona de carga en el sector de químicos incluyó uno de los pilares fundamentales para el desarrollo de la logística urbana integral como es la seguridad vial.
Bajo este concepto, la Secretaria Distrital de Movilidad realizó la actividad de marcación de puntos ciegos, enfocada en vehículos de transporte de carga, los cuales por sus dimensiones y gran volumen tienen la particularidad de tener campos visuales reducidos para el conductor.
Para la operación segura de los vehículos de carga es de gran importancia la atención a los puntos ciegos de los vehículos por parte de los conductores, en especial cuando se hacen giros a la derecha, la cual es la maniobra de riesgo más frecuente en la ocurrencia de siniestros asociados a vehículos de gran tamaño.
Al mismo tiempo, se realizó una jornada de pedagogía dirigida a conductores de carga denominada ‘Sentidos en todo sentido’. Es un juego de gran formato en el cual los participantes responden preguntas, desarrollan acciones o cumplen retos encaminados a reflexionar sobre su comportamiento como usuarios del espacio público y como promotores de valores viales.
