Gracias al trabajo que realizaron los médicos del hospital Jorge Eliecer Gaitán, Susana Gómez, de 70 años, recuperó su visión la cual había perdido hace dos años como consecuencia de una catarata madura.
Esta mujer campesina, oriunda del municipio de Güicán, en el departamento de Boyacá, llegó remitida al hospital en cilla de ruedas, donde según la entidad cada mes se realizan cerca de 150 cirugías a pacientes en sus ojos.
"El día que yo la vi, lloramos aquí en el consultorio porque fue una situación muy dura. A pesar de que nosotros como profesionales de la visión observamos pacientes todos los días, fue muy complejo ver una situación de estas, sobre todo por la condición social y su edad”, narró el doctor Tovar.
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Al llegar al hospital, lo primero que hicieron los profesionales de oftalmología fue realizar una valoración y después se le realizaron exámenes para saber el estado de su retina y en qué condiciones estaba la parte interna del ojo. Una vez se efectuaron estos análisis, se programó la cirugía.
La paciente fue intervenida por un equipo interdisciplinario de profesionales, que la acompañó antes, durante y después de la cirugía, principalmente en su proceso de recuperación y adaptación.
“Es muy emotivo y gratificante ver cómo los pacientes vuelven a ver. En el caso de Susana, el hecho de estar ciega por dos años y después volver a encontrarse, percibir las imágenes y los colores en su real dimensión, es una situación que no tiene precio para ellos como pacientes y para uno como médico”, agregó el doctor Tovar.
Por su parte, Susana Gómez agradeció la labor de los médicos: “me devolvieron la luz, estoy feliz al poder reconocer los colores y los alimentos. Cuando me recuperé todos aquí me aplaudieron, gracias a todos por su ayuda, me cambiaron la vida”.
