Con Unidades de Planeamiento Local, Bogotá se consolida como la ciudad de 30 min

POT: reglamentación de 33 unidades de planeación local, 30 urbanas Foto. Alcaldía de Bogotá.
El secretario de Planeación, Felipe Jiménez, asegura que el POT responde con equidad y rigurosidad técnica a las necesidades de Bogotá.
Publicado:
1
Dic
2023
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La Administración de la alcaldesa Claudia López, bajo el liderazgo de la Secretaría Distrital de Planeación, reglamentó en los últimos días las 33 Unidades de Planeamiento Local (UPL), 30 urbanas y tres 100 % rurales, que permiten la consolidación de la Bogotá de los 30 minutos: más próxima, integrada, cuidadora, justa, incluyente y mejor distribuida, al servicio de las necesidades de quienes habitamos el territorio.

Las UPL mejorarán significativamente la gobernanza, la seguridad y la convivencia local, con mayor eficacia de la inversión pública, participación ciudadana y una toma de decisiones más acertada.

Las 33 Unidades de Planeamiento Local (UPL), reglamentadas por la Alcaldesa Claudia López, garantizan una ciudad donde los tiempos de desplazamiento para acceder a servicios como Manzanas del Cuidado, salud, educación, cultura, comisarías de familia, casas de justicia, recreación, vivienda y oportunidades de empleo formal, así como a las actividades cotidianas del cuidado, ocio, cultura, vivienda, empleo y recreación, no superen los 30 minutos caminando, en bici o en transporte público.

Como parte de una apuesta de justicia y equilibrio territorial y poblacional, el Plan de Ordenamiento Territorial (POT) Bogotá Reverdece 2022-2035 reconoció la escala local como el ámbito idóneo para la planeación y la gestión de Bogotá. Para ello, se identificaron las zonas de la capital que cuentan con una mejor disponibilidad de servicios y aquellas que ni siquiera cuentan con la cantidad suficiente de jardines infantiles, colegios, universidades, centros de salud, vivienda y el transporte que la ciudadanía necesita.

Por eso, a través de las Unidades de Planeamiento Local (UPL) se definieron aquellas zonas que requieren más equipamientos para la prestación de servicios sociales y esenciales del cuidado, así como oportunidades de empleos formal y oferta de vivienda digna, principalmente de interés social y prioritario (VIS Y VIP), de tal manera que se garantice una mayor disponibilidad, ahorro en tiempos de desplazamientos, comodidad, bienestar, tiempo para el disfrute de otras actividades y barrios más vitales, en general, mejores condiciones de calidad de vida para quienes vivimos en la ciudad.

“El POT Bogotá Reverdece responde con equidad y rigurosidad técnica a los desafíos y necesidades que enfrenta la capital. Ahora será posible vivir en una ciudad más próxima e integrada, en la que tendremos más viviendas dignas con soportes urbanos que mejorarán la calidad de vida de las personas; con más centros educativos y de salud para atender a las personas mayores, a las niñas y a los niños, a las personas en condición de discapacidad; con Manzanas del Cuidado para atender a las mujeres cuidadoras y a quienes ellas cuidan, en las que realizan actividades de cultura, ocio, recreación y formación para vivir una vida plena y feliz. En conclusión, la vida es mejor cerquita; cerquita a todo lo que nos rodea. Con este proyecto mejoramos el suelo, la ciudad y los proyectos para vivir mucho mejor en comunidad”, Felipe Jiménez Ángel.

En el post, el Secretario de Planeación comparte información sobre el avance en la reglamentación del POT:

Esta apuesta de una Bogotá más cercana a los hogares de las personas será posible gracias a los 160 Proyectos Integrales de Proximidad (PIP) que fueron definidos entre la Secretaría Distrital de Planeación y cientos de ciudadanos de todos los rincones de Bogotá, en el marco de un proceso de cocreación, bajo una dinámica de acuerdos colectivos y soluciones reales a las necesidades puntuales de las y los habitantes y de los barrios de la capital.

Los Proyectos Integrales de Proximidad (PIP) están orientados a concretar los equipamientos para la prestación de servicios sociales y esenciales de cuidado en edificaciones nuevas y existentes, el cuidado de la Estructura Ecológica Principal, el reverdecimiento de nuestra ciudad, mejorando y conectando la oferta de espacio público local, arborizando e iluminando el entorno de nuestros barrios y el Sistema de Transporte Público de la ciudad, entre otros aspectos.

Así mismo, reconocen y protegen los patrimonio materiales e inmateriales, promueven alternativas para la movilidad local, como el tránsito peatonal y en bicicleta, potencian entornos productivos locales y generan condiciones propicias para que las personas puedan disfrutar de la ciudad de manera más segura. Estos proyectos están pensados para mejorar la calidad de vida de los habitantes de las zonas urbanas y de las rurales.

Es importante precisar que la adopción de las Unidades de Planeamiento Local (UPL) no reemplaza las localidades de la ciudad. La delimitación de las localidades corresponde a la división política y administrativa que se da en el marco del artículo 6 de la Ley 2116 de 2021, Estatuto Orgánico de Bogotá, que establece que la facultad para decidir dichos cambios le corresponde al Concejo Distrital.

Unidades de Planeamiento Local (UPL): la proximidad para el cuidado de las personas

Estas son las 33 UPL y así están distribuidas:

El occidente de Bogotá armoniza sus dinámicas con 4 Unidades de Planeamiento Local

En el occidente se ubican cuatro Unidades de Planeamiento Local (UPL): Fontibón, Engativá, Tabora y Salitre, delimitadas al norte por el humedal de Tibabuyes-Juan Amarillo, al nororiente por el río Salitre, al oriente por la Avenida Carrera 68, al sur por el río Fucha y al occidente por el río Bogotá y el humedal Meandro del Say.

Se desarrollarán 22 Proyectos Integrales de Proximidad (PIP) que permiten repensar y cualificar el tejido urbano, equilibrando, diferenciando y armonizando las dinámicas existentes, de manera que la apuesta fundamental sea organizar y conectar el territorio.

Es de recordar que el occidente es el corazón económico de Bogotá-Región y una de las zonas más estratégicas para el país, al contar con la presencia del Aeropuerto Internacional El Dorado, además de ser un sector rico en términos ambientales.

Se desarrollarán ejes viales regionales y locales que propician la integración de los diferentes modos de transporte; se promoverá la localización de actividades especializadas asociadas a servicios que aprovechan la cercanía al Aeropuerto Internacional El Dorado para generar un alto valor agregado.

Se acercará la oferta de empleo formal al sector, y se construirán nuevos espacios públicos reverdecidos y servicios sociales y esenciales del cuidado, para mejorar las condiciones de calidad de vida de los 1.209.897 habitantes del sector.

2.Con 6 Unidades de Planeamiento Local, el Centro Ampliado de Bogotá se recupera, se revitaliza y se reverdece para mejorar la calidad de vida de los residentes y visitantes

En el Centro Ampliado se ubican 6 Unidades de Planeamiento Local (UPL): Chapinero, Barrios Unidos, Teusaquillo, Puente Aranda, Restrepo y Centro Histórico. Están delimitadas al oriente por los Cerros Orientales y al costado suroriente por la carrera 10; al norte por la calle 100; al occidente por la carrera 68 y al sur por las calles 35C, 46A y 47A sur.

En esta zona de la ciudad se desarrollarán 25 Proyectos Integrales de Proximidad que permitirán un territorio más reverdecido y conectado, con redes peatonales, franjas de conectividad en la malla vial, más árboles, espacios públicos de calidad y servicios sociales y esenciales de cuidado de escala local, que mejorarán la vida cotidiana, tanto de residentes como de visitantes, y promoverán una relación armoniosa y sostenible de la ciudad con su ruralidad.

En el Centro Ampliado se realizará uno de los procesos de revitalización más grandes de la historia de Bogotá, que permitirán que este epicentro donde convergen la historia, la economía, el patrimonio y la cultura, y que, a su vez, es el motor financiero del país, el epicentro laboral y educativo, se recupere, se reverdezca y se reactive, para que se siga convirtiéndose en un polo de desarrollo de la capital y de Colombia.

3. Nuestros ríos son el eje estructurador de las 6 Unidades Planeamiento Local: se organiza el suroccidente de Bogotá

El sector suroccidente está conformado por 6 Unidades de Planeamiento Local (UPL): Tintal, Patio Bonito, Porvenir, Edén, Bosa y Kennedy. Está delimitado por el río Bogotá al norte, el río Fucha al nororiente, la Avenida Carrera 68 al suroriente, la Autopista Sur al sur y por las carreras 77G y J de los barrios de Bosa Centro, que colindan con el municipio de Soacha-Cundinamarca, y el río Tunjuelo que desemboca en el río Bogotá.

Se desarrollarán 32 Proyectos Integrales de Proximidad (PIP) con los que se constituirá el agua como elemento estructurador que conecta parques, equipamientos y centros productivos, para acercar a las personas a entornos saludables y reforzar los conectores ecosistémicos de la Media Luna del Sur y el río Fucha. A su vez promueven dinámicas productivas, frentes activos para el comercio y prácticas de economía circular.

De igual manera, fortalecen las conexiones hacia equipamientos educativos y de salud y el espacio público nuevo y recuperado para reverdecer el sector y mejorar la calidad de vida de los 1.777.925 habitantes del sector (el segundo sector más denso de Bogotá).

4. Un suroriente que se reorganiza en 6 Unidades de Planeamiento Local para potenciarse como una plataforma turística en la ciudad

En el suroriente se ubican 6 Unidades de Planeamiento Local (UPL): Arborizadora, Lucero, Tunjuelito, Rafael Uribe, San Cristóbal y Usme Entrenubes.

Se encuentran delimitadas al norte por la Autopista Sur; la Avenida Caracas y el río Fucha, al occidente por la ladera del Parque Ecológico de Montaña Cuchilla Guacamayas; los Cerros Orientales por el oriente, y al sur por la UPL Cuenca del Río Tunjuelo.

Se desarrollarán 32 Proyectos Integrales de Proximidad (PIP) que, a través de los principales cuerpos hídricos del sector, crean una conexión transversal entre los territorios y desarrolla nuevos espacios públicos y equipamientos.

Se crearán circuitos que conecten sitios de interés cultural o patrimonial, barrios vitales y estaciones del cable, para garantizar los desplazamientos seguros y conectados y potenciar plataformas de turismo.

Así mismo, se constituirán redes a través de las calles para conectar los equipamientos de cuidado y espacios públicos importantes en la vida barrial. Por ejemplo, la Red de Miradores del Sur conecta en su interior senderos reconocidos en el Plan de Ordenamiento y Manejo (POMA) del Parque Entrenubes, y algunos validados por caminos y recorridos turísticos existentes que merecen estructurarse para entregarle a la ciudad una plataforma turística y gozar de la vista del sector.

5. A través de 5 UPL se mejora la accesibilidad y la vitalidad del espacio público en el norte de la ciudad

El norte de la ciudad está conformado por 5 Unidades de Planeamiento Local (UPL): Britalia, Toberín, Usaquén, Niza y Torca. Están delimitadas al oriente por el perímetro urbano colindando con los parques de borde del Área de Ocupación Público Prioritaria (AOPP) de la UPL Cerros Orientales; al sur con la Calle 100-Avenida 68 y el río Salitre; al occidente los cerros de Suba, colinda con las UPL Rincón de Suba y Suba y continúa por la quebrada La Salitrosa y el Humedal de La Conejera hasta llegar al río Bogotá; y el río Bogotá y límite del distrito bordean el sector al noroccidente y al norte.

Se desarrollarán 25 Proyectos Integrales de Proximidad (PIP) que incentivarán que la ciudadanía se pueda mover mejor, a pie y en bicicleta de manera más fácil y segura, cuente con equipamientos de servicios sociales y esenciales del cuidado y frentes activos para el comercio.

Al tiempo, mejorarán las condiciones de accesibilidad y vitalidad del espacio público, propiciando entornos más verdes, atractivos y seguros. Se propenderá por reconectar los Cerros Orientales con los de Suba y el río Bogotá con conexiones peatonales y de bicicletas.

6. El noroccidente se reorganiza con 3 Unidades de Planeamiento Local para tener más servicios sociales

En el sector Noroccidente se ubican 3 Unidades de Planeamiento Local (UPL): Suba, Rincón de Suba y Tibabuyes. Se encuentran delimitadas al norte por el Humedal La Conejera y la quebrada La Salitrosa, al oriente con los cerros de Suba y el Cerro La Conejera, al sur con el Humedal Juan Amarillo-Tibabuyes, y al occidente con el río Bogotá, el cual define la separación político-administrativa con el municipio de Cota.

Se desarrollarán 11 Proyectos Integrales de Proximidad (PIP) que permitirán habilitar suelo para la localización de servicios sociales y esenciales del cuidado, así como entornos productivos que promuevan la reactivación económica y la generación de empleo formal.

Además, promueven alternativas para que los cerros de Suba se articulen con los barrios, humedales y el río Bogotá, por medio del reverdecimiento de senderos y corredores.

7. 3 Unidades de Planeamiento Local (UPL) 100 % rurales: Bogotá es rural

La ruralidad de Bogotá constituye el 75 % del territorio de Bogotá. La ruralidad de Bogotá se organizó en 3 Unidades de Planeamiento Local (UPL): Cerros Orientales, Cuenca del Tunjuelo y Sumapaz. En el norte, oriente, sur y suroriente el sector rural coincide con el límite del Distrito.

En estas UPL que son 100 % rurales, se desarrollarán 8 Proyectos Integrales de Proximidad (PIP), que permitirán aumentar y diversificar la oferta de servicios sociales y esenciales de cuidado para que los campesinos y las campesinas tengan mejor acceso a educación, salud y recreación, entre otros.

Consolidar redes de proximidad para acercar a las comunidades rurales a dicha oferta y al patrimonio rural; generar más espacios públicos y de integración para que los vecinos y familias puedan compartir, y nuevas áreas para el intercambio de bienes y productos que aseguren óptimos ingresos para los hogares.

Además, corredores inteligentes de turismo y estrategias para el cuidado del patrimonio, la flora y la fauna.

Estos proyectos además permitirán la protección de las áreas ambientales, vitales para el aire, el agua, la flora, la fauna silvestre y la vida de todos los habitantes de Bogotá y la región.

Así mismo, garantizarán una mejor conexión al interior de esta parte de la ciudad, y entre el campo y las zonas urbanas, incluso con la región.