La gerente de TransMilenio Alexandra Rojas aclaró que las rutas alimentadoras del sistema no se eliminarán, se transformarán para que los usuarios validen su pasaje desde el momento que ingresen al bus.
“Necesitamos simplificar el sistema y las rutas alimentadoras al no tener validación, como hasta ahora, estaban generando una distorsión de su funcionalidad e ineficiencias en el servicio. Esta trasformación será un proceso gradual y se inició desde el año pasado”, señaló la alta funcionaria.
La gerente también destacó que con el nuevo sistema tarifario establecido este año para el sistema, que permite dos trasbordos sin costo durante 95 minutos, el cambio a los buses rojos de TransMilenio no generará ningún costo para los usuarios.
Este cambio que se adelanta de manera progresiva. Inició desde el año pasado y ya se han trasformado cinco rutas alimentadoras: Altamira, Tibatita, Guaymaral, Las Cruces y Ramírez.
Estas prestan el mismo servicio de alimentación, con los mismos paraderos de los trazados originales que eran cubiertos por los buses verdes, lo que ha representado una mejoría en el servicio para los usuarios.
A estos cambios se suman tres rutas nuevas que se crearon el año pasado y que operan alimentando la troncal de la Autopista Norte. Se trata de: Barrancas, Chicó y Cabrera, las cuales han tenido muy buena acogida por parte de los usuarios.
“Esto es algo que se debe hacer y que de forma responsable estamos haciendo, consolidando TransMilenio como un solo sistema: troncales y buses para integrarse adecuadamente con el Metro y TransMiCable”, puntualizó la gerente de TransMilenio.