"Los sueños de Matilda": la historia que invita a salvar nuestro planeta

Una escritora, hija de la educación pública de Bogotá, creó un mundo literario con el objetivo de introducir a niñas y niños en la lectura y la escritura, y a la vez, llevar un mensaje de conciencia ambiental. Esta es la historia de la muñeca Matilda.

“Si quieres al planeta salvar, Matilda te va a ayudar” es el mensaje que transmite esta niña de cabello café y gran sonrisa, que acompañada de personajes como Arsen, el padre de todos los árboles y Manchas, el perro dálmata que enseña valores como la lealtad, el amor y el apoyo a otros, está cautivando el corazón de los lectores más pequeños de la educación pública de Bogotá.

La mente detrás de estos personajes literarios es Angélica Bran, egresada de un colegio Distrital de la localidad de Tunjuelito, y escritora de cuentos infantiles, quien desarrolló una metodología para generar conciencia ambiental y demostrar a niñas y niños que los libros son sinónimo de diversión.

Angélica es licenciada en Lingüística y Literatura y desde hace más de 10 años se dedicó a crear el universo literario de ‘Los sueños de Matilda’. Se trata de una niña que en sus sueños se encuentra con personajes de la naturaleza que le cuentan cómo el medioambiente se ve afectado por prácticas humanas irresponsables.

Pero más allá de los 18 cuentos que ha escrito, divididos en 3 series, Angélica tiene todo un proyecto pedagógico en el que combina las letras con juegos, obras de teatro, canciones y ayudas multimedia. Gracias a estos recursos, se incita la curiosidad de niñas y niños que al final de cada taller, quieren continuar la lectura para saber qué pasó con Matilda y los demás personajes.

Al colegio Rafael Uribe Uribe, ese mismo que la vio crecer, Angélica regresó con una muestra de su trabajo literario y de los talleres dirigidos a niñas y niños menores de 5 años. Su metodología reúne los elementos con los que la Educación Pública de Bogotá estimula las capacidades de los estudiantes que pasan por su etapa de Educación Inicial: juego, arte, literatura, y exploración del medio.

Durante la sesión, Angélica acompaña la lectura de uno de sus cuentos cortos junto a una animación audiovisual que les da vida a los personajes que se encuentran en el texto. De esta forma, la lectura se convierte en un viaje multimedia en el que todos los sentidos se activan.

Los niños bailan, interactúan, preguntan, y desde luego, dirigen su atención a cada pasaje de la historia. Al final, salen del recinto felices después de haber desfogado toda su energía en lo que para muchos fue un juego, pero realmente es una manera lúdica de acercarse a la lectura.

Según Angélica, niñas y niños se enganchan con sus cuentos porque tienen un alto contenido visual, el cual es fundamental para estimular los sentidos durante los primeros años de edad.

“La lectura de imágenes es fundamental en la primera infancia”, afirma la escritora, quien pretende que a través de su proyecto los pequeños lectores no solo ejerciten su motricidad y su capacidad para leer palabras correctamente, sino que además, aprendan desde muy temprana edad a generar procesos de pensamiento.

“He sido profesora de bachillerato y normalmente, los niños llegan con problemas de comprensión o apatía a la lectura”, asegura Angélica. Esa fue la razón por la que decidió crear una propuesta interdisciplinar de lectura, escritura y oralidad, donde el tema principal es el medio ambiente.

Sus cuentos están acompañados de bellas ilustraciones de animales, elementos de la naturaleza y seres humanos. Y las rondas infantiles generan una conciencia real sobre el medio ambiente, que posteriormente, los profesores pueden cultivar a través de las ayudas pedagógicas que se trabajan en el aula.

Esta iniciativa, a la que Angélica le ha dedicado corazón y mente, se convirtió en una de las 2 mil Iniciativas Ciudadanas de Transformación de Realidades (Incitar), con las que la Secretaría de Educación apoya los proyectos dirigidos a causar un impacto en las comunidades, o como en este caso, proponen una transformación en la enseñanza.

El proyecto de Angélica le apunta a reforzar las prácticas pedagógicas para que los niños realmente aprendan a leer y se motiven a escribir. La idea es ejercitar en ellos la lectura inferencial, es decir, su capacidad para comprender información que está implícita en el texto, pero que no aparece textualmente.

“Los estudiantes de bachillerato muchas veces son muy literales y creen que lo que no se encuentra en el texto es porque no existe”, explica Angélica, quien tiene razones de peso para hablar de estos temas, pues ‘Los sueños de Matilda’ además de ser su principal creación literaria, está inspirada en sus casi 20 años como docente de primaria y bachillerato, donde pudo identificar estas falencias.

El sueño de esta escritora, que actualmente se encuentra ampliando la serie de cuentos de Matilda, su personaje principal, es llegar a la mayor cantidad de niñas y niños de los colegios públicos de la ciudad y del país.

“Quiero hacer mi aporte para que un día podamos decir que los niños de Colombia han mejorado notablemente sus capacidades lectoras”, expresa Angélica, quien permanentemente, trabaja para que su proyecto esté a la vanguardia mundial en materia de introducción a la lectura y la escritura.

Por: David Amaya Alfonso