Animales 'bebés', nuevas víctimas del tráfico de fauna silvestre

Según la Secretaría de Ambiente, desde el mes de febrero, han ingresado al Centro de Recepción de Fauna de la entidad 30 “pequeños”, que han sido recuperados en las oficinas de enlace de las terminales de transporte de Bogotá.

El grupo de animales de edad infantil lo conforman aves y mamíferos, como loras, pericos, una guacamaya azul, un mono nocturno y un perro de monte.

Los expertos de la SDA ingresaron a estos animales a la zona de neonatos del Centro de Fauna, donde cuentan con una temperatura adecuada para su crecimiento y son alimentados con una dieta especial.

La mayoría de las loras y pericos llegaron sin plumas. Por su parte, el mono nocturno fue acogido en el programa de mamá canguro por parte de Martha Silva, una de las cuidadoras del Centro de Fauna, que lo carga en una pequeña bolsa cerca a su pecho las 24 horas del día.

La guacamaya azul fue decomisada por las autoridades. La persona que la tenía aseguró que la compró hace aproximadamente tres meses en una carretera del departamento del Cesar, y la alimentó con leche y galletas.

“Debemos tomar conciencia sobre el daño que le hacemos a los animales silvestres al sacarlos de su hábitat natural. En el caso de la guacamaya debemos trabajar fuertemente para que pierda sus viejos hábitos alimenticios, y empiece a comer frutas. Luego reforzaremos su capacidad de vuelo, para que así pueda ser liberada en las selvas húmedas tropicales”, apuntó Yudy Cárdenas, bióloga de la Secretaría de Ambiente.

En los últimos días fueron recuperadas dos guacamayas azules más, que ingresaron al Centro de Fauna en mal estado, con el plumaje opaco y sin cola. Esta especie se encuentra amenazada en el país por su comercialización ilegal.

“Los animales silvestres no son mascotas. El llamado es para que los ciudadanos no hagan parte de la cadena del tráfico ilegal al comprar estos animales, y a que recuerden que en tu casa no se sienten como en su casa”, puntualizó Cárdenas.