Desde marzo de 2020, el alcalde de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta y la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, integran el Comité Directivo de C40 Cities, que es el grupo de grandes ciudades del mundo comprometidas con la acción climática. En su rol de vicepresidentes por Latinoamérica, ambas ciudades han trabajado en forma conjunta para involucrar activamente a las ciudades de la región en el desarrollo de políticas climáticas.
En el marco de este esfuerzo, se realizó el Encuentro entre alcaldes: Diálogo por la acción climática en las ciudades latinoamericanas en el contexto COVID-19, un intercambio de visiones y experiencias vinculadas a la adaptación de las ciudades al nuevo contexto urbano, y con miras a la próxima Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2021 (COP26).
Luz Amparo Medina, Directora Distrital de Relaciones Internacionales de la Alcaldía Mayor de Bogotá, moderó la conversación entre los participantes, quienes presentaron las medidas que han tomado sus ciudades para manejar la pandemia por el COVID-19 y para contrarrestar los del cambio climático en sus ciudades.
Durante la reunión se resaltó la importancia de tener espacios de discusión y de redes como C40 en la promoción de la agenda climática y en la generación de estrategias conjuntas para poder atender la crisis del calentamiento global. A su vez, se llegaron a conclusiones puntuales para que las ciudades participantes tengan las cuentan y las implementen:
- Es urgente actuar en este momento y por eso se deben generar políticas a corto, mediano y largo plazo para lograr resultados en términos de la Agenda 2030.
- La COVID-19, es una oportunidad histórica para reconstruir las ciudades de una manera más resiliente, sustentable e inclusiva.
- Es fundamental el trabajo conjunto para poder seguir avanzando en la implementación de una “agenda verde” en la región que promueva la movilidad y el diseño sostenible, al igual que el desarrollo e implementación de políticas públicas para el uso de la bicicleta.
Esta reunión, con sus conclusiones, es un reflejo del liderazgo de Bogotá y Buenos Aires en la generación de espacios internacionales donde se promueva la implementación de una agenda climática que cumpla con el objetivo de una recuperación verde y justa en los países de Latinoamérica.
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