Gracias al Decreto 795 de 2018, aprobado por el alcalde Enrique Peñalosa, el trabajo comunitario por los animales es una realidad.
Quienes hayan incurrido en sanciones como tenencia inadecuada de animales, no llevar a los perros de raza fuerte con bozal, no recoger las excretas de su animal de compañía u orinar en sitios prohibidos, entre otras, podrán resarcir dichas multas con trabajo comunitario, apoyando las diferentes labores que se realizan en la Unidad de Cuidado Animal.
Más de 120 personas catalogadas como infractores del Código de Policía han prestado trabajo comunitario en la Unidad de Cuidado Animal.
Con limpieza de gateras y caniles, embellecimiento de exteriores y paseo de los caninos en las zonas verdes del lugar, los infractores de sanciones tipo 1 y 2 retribuyen a la ciudad los daños ocasionados con sus faltas.
El trabajo comunitario con el Instituto Distrital de Protección y Bienestar animal comenzó el pasado mes de agosto y aplica para las personas que por diferentes circunstancias hayan sido sancionadas por los inspectores de policía y no pueden pagar las multas.
El infractor puede escoger entre varias alternativas en diferentes entidades del Distrito. El trabajo en la Unidad de Cuidado Animal está enfocado al apoyo en algunas actividades por los animales que han sido rescatados del maltrato o accidentes y ahora se recuperan en la Unidad bajo custodia del Instituto.
Los interesados en prestar el trabajo comunitario en la Unidad de Cuidado Animal solo deben manifestarlo ante el inspector de policía que impone la sanción.