Los residuos de las podas y mantenimiento que realiza la Alcaldía de Bogotá, en diferentes zonas de la ciudad, no se desperdician. El Jardín Botánico aprovecha el pasto, ramas y hojas que provienen de estas labores para producir cuatro toneladas de abono cada semana para sus plantas.
Este abono cumple con los parámetros que exige la norma para abonos orgánicos, la cual requiere que sea libre de la bacteria salmonella y con niveles óptimos de PH.
Este, a su vez es utilizado para las huertas que hacen parte del programa de agricultura urbana y las plantaciones de restauración ecológica del Jardín Botánico de Bogotá. La buena calidad de este material permite que el arbolado interior también se surta con el compostaje que fabrican.
Su producción
Hasta cinco meses tarda el Jardín Botánico en producir abono en las zonas de aprovechamiento de residuos orgánicos y energías renovables que tiene la entidad.
El proceso tiene varias partes. Primero, los residuos provenientes de las podas y labores de mantenimiento se mezclan con estiércol, cal, melaza y algunos microrganismos, que ayudan a la descomposición.