El Distrito informó sobre el manejo que se le va a dar a la sobrepoblación de palomas que se registra en la Plaza de Bolívar, en el centro de Bogotá. Así mismo, reveló un diagnóstico que se hizo sobre este fenómeno para determinar su impacto en la salud pública.
“Esta Administración se ha destacado por el énfasis que le hemos dado a la protección y bienestar de los animales. Y todo lo que vamos a hacer con las palomas es sobre estos parámetros. Estamos adelantando una campaña educativa para que los ciudadanos entiendan que no debemos alimentar a las palomas, porque esto, las está afectando. También vamos a hacer una intervención médica veterinaria en las palomas para controlar la sobrepoblación”, explicó la directora del Instituto Distrital de Protección y Bienestar Animal, Clara Lucía Sandoval.
También destacó un diagnóstico que hizo esta entidad durante cinco meses, con la participación de biólogos, veterinarios y sociólogos, en el que se determinó que el 40 % de estas palomas están enfermas con parásitos, internos y externos, y viruela, por lo que es urgente realizar una intervención sobre estas.
“Hay estudios que confirman la presencia de virus y bacterias en las heces fecales como la salmonela y la clamidia, que pueden producir trastornos en las personas especialmente en niños y adultos mayores. Además, el polvillo en el que se convierten estas heces fecales y que está en el ambiente también afecta la salud humana”, señaló la directora de Instituto.
Este estudio identificó otras enfermedades que pueden afectar el sistema inmunológico, como la histoplasmosis y ornitosis, las cuales pueden impactar en la fauna silvestre y el entorno. Cabe destacar que por cada metro cuadrado en donde debería haber cinco palomas, se encuentran hasta 33.
Además, se encontró que la sobrealimentación afecta sus comportamientos naturales: “Hay palomas que hacen nidos con pelo, polisombra, cables… Otras pican las bolsas de basura, ya no están comiendo lo que deberían comer como semillas e insectos, sino, por el contrario, están comiendo desperdicios que se dejan en este sitio”, agregó Sandoval.
Así mismo, este estudio encontró que, un fin de semana en el que se incrementa la cantidad de turistas en la plaza, el número de palomas puede superar las 3.500. De lunes a viernes esta cifra llega a 1.300, todo esto demuestra que las aves visitan la Plaza de Bolívar solo en busca de alimento.
Oferta laboral para los maiceros
La directora del Instituto Para la Economía Social (IPES), Gladys Valero, aseguró que desde el Distrito se adelantan diferentes acciones para reubicar a las 14 personas que tradicionalmente venden maíz en la Plaza de Bolívar. Y se proyecta que dentro de dos meses ya estén vinculados a la oferta institucional.
“Siempre nos hemos preocupado por la economía informal. Ya 8 de estos vendedores, que son mayores de 60 años, se encuentran en proceso para incorporarse a proyecto social para vender diferentes productos comestibles dentro de empresas públicas y privadas”, exaltó la directora.
Por su parte, otros cinco están en trámites para otorgarles un kiosko, los cuales se ubicarán en el centro. Asimismo, Valero señaló que están manejando un plan integral para le economía informal, para que los hijos de estos vendedores accedan a formación y puedan aspirar a un empleo formal.
“Como siempre se recupera, se busca la sostenibilidad de la ciudad, con programas en donde podamos vincular a los vendedores informales. Así es que de los 14 tradicionales, 13 ya han aceptado alternativas”, resaltó Valero.
Por otro lado, el coronel Óscar Daza, comandante de la Fuerza Disponible de la Policía, destacó que en la Plaza de Bolívar se dispuso una zona especial de seguridad y una zona recuperada de espacio público.
“Las decisiones administrativas que se están tomando para el control de estos vendedores de maíz, es de regulación, mientras ellos se acogen a las alternativas, siempre respetando a los que ya están identificados para este proceso”, explicó el coronel.