Este martes 1 de marzo, las calles del centro de Bogotá se llenaron de colores, sonidos, aromas y cantos para recibir el nuevo año de los pueblos indígenas Inga y Kamentsa, como muestra de la diversidad de los patrimonios vivos que habitan la ciudad y dando nuevos sentidos en el reconocimiento de una nación pluriétnica y multicultural.
El Instituto Distrital de Patrimonio Cultural IDPC, se unió a la celebración del día grande e invitó a la ciudadanía a conocer, divulgar y compartir la llegada del nuevo año que permita el reencuentro con el territorio, la vida y la cultura desde la ancestralidad.
El festejo de un nuevo año Inga y Kamentsa
Esta festividad es celebrada anualmente los martes, un día antes del miércoles de ceniza, y se presenta como un tiempo de encuentro y reencuentro entre la familia y el territorio. Es el festejo de un nuevo año, en el que se comparten versos en lengua materna, el alimento y la bebida propia y se recrean prácticas culturales propias de los pueblos Inga y Kamentsa.
Contenidos relacionados
En la ciudad de Bogotá el cabildo inidigena Inga se prepara para esta celebración alrededor de la construcción del castillo de palmas y el sacrificio del gallo, el compartir y preparación del alimento entre muchas otras, en agradecimiento y homenaje a la Madre Tierra.
El Atun Puncha se viene realizando en Bogotá desde 1984, ya son 25 años en los que los Ingas se unen por medio de la danza, el canto, el espíritu y el pensamiento bonito para festejar el inicio de un año más de vida y de esta manera rendirle homenaje a la Alpa Mana y al Arco iris. De igual manera se ha retomado el Divichidu que consiste en visitar previamente a las familias e invitarlas a participar de este encuentro.
Estas visitas y recorridos se realizan una semana antes y son de gran importancia para la pervivencia cultural y revitalización de los saberes, la cultura y la identidad de este pueblo en Bogotá.
