El alcalde Mayor de Bogotá, Gustavo Petro, instaló el fuerte de carabineros que operará en Ciudad Bolívar, ubicado en la vereda Quiba – Baja, sector Ojo de Agua, en límites con el municipio de Soacha, lugar donde los residentes demandaban presencia de las autoridades.
Este fuerte contará inicialmente con la presencia de doce policías carabineros en dos turnos, que se incrementarán a 20, con la misión de proteger las veredas Quiba y Mochuelo, así como la protección de la 'frontera' con el municipio de Soacha, lugar donde se está abriendo una carretera.
El alcalde Mayor lideró la entrega del fuerte de seguridad, con el que se sella un compromiso entre la Administración y la Policía Nacional, para trabajar en conjunto por la seguridad del sector.
“Bogotá es el gran mercado nacional de droga, por lo que las mafias poderosas que estaban ubicadas en el centro de la ciudad van subiendo hacia la periferia y que por ésta razón hay que atender la seguridad de áreas rurales geográficamente estratégicas para el tráfico de drogas”, dijo el burgomaestre.“La ubicación de este fuerte es la primera parte de una estrategia que comienza con la instalación de personal policial y luego la instalación de la infraestructura” aseguró el Alcalde.
Además recordó que “los barrios que limitan ésta gran herradura alta, son los barrios más violentos de la ciudad de Bogotá y por lo tanto tiene que ver con el hecho de que las rutas del narcotráfico entran a la ciudad de Bogotá por medio de lugares como éste”.
Finalmente Petro afirmó, que un bogotano promedio, no sabe que existen campesinos bogotanos, y este desconocimiento ha provocado una paradoja que hay que superar.
Por su parte, Marilyn Gómez, representante de la vereda Quiba – Baja aseguró que “la presencia del fuerte ha mejorado mucho la seguridad del sector, ya que ha disminuido el robo de ganado y los carabineros han ayudado en el control de la seguridad”.
La dotación entregada por parte de la Administración, contempla el costo del arrendamiento de la finca donde operará el fuerte, que cuenta con una casa de tres habitaciones, dos baños, cocina y sala comedor, dotadas con los utensilios necesarios para permitir que la Policía de Carabineros que operará en la zona goce de un espacio con las comodidades básicas, para el buen desempeño de sus labores.