Diariamente, Carol sale a recorrer las calles de Bogotá, velando por la seguridad de sus compañeros de La Rolita y los usuarios.
“Mi trabajo se trata de realizar o prestar la primera asistencia a los eventos, accidentes, ya sean simples o con lesionados, y darle como primera instancia”, comentó Carol.
Añadió que este trabajo ha sido un sueño cumplido: “La pasión inicia desde el primer momento en el colegio, cuando dicen qué quiere estudiar o qué quiere ser cuando sea grande. Desde un principio dije que quería apoyar y ayudar a la comunidad”.
Esta operadora que apuesta por la sostenibilidad y la equidad de género, cumplió su primer año de operaciones, en el que realizó 10 millones de viajes, generando a su vez más de 600 empleos, en su mayoría para mujeres.
“Estoy contenta de que nos den el apoyo y nos den la ayuda a nosotras las mujeres (...) Además de apoyo económico, pues es algo que realizo con mucho cariño y me gusta hacer”, apuntó Carol Loaiza.
De los 1.485 buses eléctricos que tiene Bogotá, 195 de son de La Rolita.