La propuesta de Plan de Ordenamiento Territorial (POT) presentada a consideración del Concejo Distrital incluye la perspectiva de género y busca eliminar las brechas existentes entre hombres y mujeres desde el ámbito territorial.
“Así se puede evidenciar en la Estructura Ambiental y de Espacio Público, la Estructura Funcional y de Soporte y su Sistema de Movilidad, la Estructura Social y Económica, y su Sistema de Equipamientos, entre otros”, aseguró el secretario Distrital de Planeación, Andrés Ortiz Gómez.
Como resultado de las mesas de trabajo desarrolladas entre la Administración Distrital y las Organizaciones Sociales de Mujeres (OSM), en las que se destacó la participación del Consejo Consultivo de Mujeres, la Fundación AVP para el Desarrollo y la Secretaría Distrital de la Mujer, quedaron consignados ajustes sustanciales en el articulado del proyecto POT.
La propuesta de POT entiende las necesidades de las mujeres en la capital del país, que representan un 52% de la población total, y que buscan, por ejemplo, acabar con los viajes distantes entre sus empleos y los hogares y entre los equipamientos necesarios para atender las labores del cuidado del hogar como son los colegios, guarderías y hogares geriátricos, entre otros.
El sistema de equipamientos planteado en el POT también servirá para atender las necesidades específicas de las mujeres que, por efecto de las condiciones sociales existentes, requieren equipamientos relacionados con la integración y bienestar social y la participación social e igualdad de oportunidades. Los ejemplos de estos equipamientos son las Casas de Igualdad y Oportunidad para las Mujeres (CIOM) o los centros de atención a personas que realicen actividades sexuales pagadas.
Estrategias para facilitar desplazamientos
Frente a la necesidad de cercanía de los empleos con los hogares, el proyecto POT apunta a resolver esa situación por medio de una nueva estrategia normativa que permite la mezcla de usos responsable y con mitigación de impactos. Esto da la oportunidad a las empresas de ubicarse de manera equilibrada por toda la ciudad y, en especial, sobre los ejes de transporte público masivo, promoviendo una ciudad policéntrica que, a su vez, les permita especialmente a las mujeres disminuir los desplazamientos internos.
Es importante entender que las personas tienen desplazamientos diferentes dentro de la ciudad y mientras que una persona que no tenga a su cargo “dependientes” se moviliza en sentido lineal (de su hogar al trabajo), una persona cuidadora, como es en gran medida el caso de la mujer en una ciudad como Bogotá, tiene desplazamientos circulares (del hogar al colegio y luego al trabajo).
Por tal razón, la propuesta de POT plantea que la red de transporte público complementario del nivel distrital (SITP y TransMiCable) pueda incluir rutas circulares que faciliten los desplazamientos a nivel barrial y zonal, relacionados con actividades asociadas a la “economía del cuidado”.
Espacio público seguro para las mujeres
Debido a que los espacios públicos se han convertido en lugares inseguros para las mujeres, la iniciativa de POT establece que las áreas que prestan servicios a la Estructura Ambiental y de Espacio Público deben contar con libre acceso, inclusión de todos los grupos poblacionales y además deben ser seguros. Es el caso de los andenes, los cuales deben ser diseñados y construidos para facilitar la movilidad, por ejemplo, de los coches de bebé.
Las Organizaciones Sociales de Mujeres solicitaron que los parques y áreas verdes tengan en cuenta soluciones de diseño de acuerdo con sus propias dinámicas e intereses, ya que actualmente los parques son equipados alrededor de deportes que en su gran mayoría los practican hombres, en tanto las practicas recreativas y deportivas de las mujeres no son tenidas en cuenta. En tal sentido, el documento de propuesta POT contiene este tema como un lineamiento obligatorio.
Así mismo, la estrategia normativa planteada en el POT le apunta a la seguridad humana con énfasis en niñas y mujeres. Utilizará como mecanismo los primeros pisos activos, para hacer de las calles lugares más seguros. De esta manera, será posible la seguridad especialmente para las mujeres, al contar con redes de apoyo y “ojos en la vía”, que estén pendientes de situaciones riesgosas. La confluencia de personas en la calle es lo que hace a una ciudad más segura.