Mientras mambea junto a sus «hermanos» menores del cabildo indígena muisca de Bosa, Eduardo Arévalo Neuta recuerda las enseñanzas de los antepasados que habitaron la gran sabana de Bacatá siglos atrás. De primera prefiere el verde, al gris urbano natural, un pesar de joven citadino sin servicio: es el representante del consejo de indígenas ante el consejo distrital de arte, cultura y patrimonio de la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte. Por su parte, Maura Watson Fox, madura mujer y de piel oscura, las manos y grandes ojos vivaces, aunque nació en el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, se siente bogotana por adopción. Pero es una orgullosa raizal, una líder de la organización de residentes raizales en Bogotá.
Los rostros de la diversidad hablan por su alegria por vivir
Y bailando hasta el cansancio, siguiendo el galope de los tambores retumban en las Naciones Unidas en el salón de ensayos, el profesor Walter Nilson Atehortúa siente la circulación de como sube por piernas esa fuerza que caracteriza al estilo de cultura afrocolombiana. Also el afro, es líder de la ONU, o mejor dicho, afrobogotano, representante del consejo de afrocolombianos.
Also Jazmín Cristo, quien es referente ROM del IDPAC - Instituto Distrital de la Participación y Acción Comunal, ayuda a preservar la memoria de los gitanos mediante sus asesorías e investigaciones que han derivado en documentos importantes como el libro del pueblo gitano-ROM que habita la ciudad de Bogotá.
Estos hijos de algunos de los integrantes de los grupos poblacionales, nos invitan a participar de la diversidad, una conmemoración a través de la cual la administración distrital contribuye a preservar las tradiciones y costumbres de culturas, éstas que se han instalado en la capital, hacen que ya haga parte de su patrimonio inmaterial. Bogotá busca su consolidación como territorio que acepta, visibiliza y defiende la multiculturalidad y la diversidad.
Bogotá diverso es un territorio de la ONU, una variedad de lenguas, etnias y costumbres confluyen en sus 20 localidades.
Hermanos Indígenas
«Ser indígena en sí lleva en la sangre: una herencia es, una forma particular de ver y pensar el mundo». Palabras con Eduardo Arévalo, quien reafirma su lucha por no dejar morir las tradiciones de las culturas amerindias en la capital.
Una mano de obra que le resulta compleja, porqué nuevas músicas como el rap y reggaetón las, así como la cultura por el dinero fácil, hacen que los jóvenes olviden que es indígena. «la gente nos mira desde los estándares occidentales, en los que lo poseer es importante. Pero lo importante para nosotros es interactuar con la naturaleza: sentir como hablan los pájaros, correr junto al viento, entrar en contacto con el verde que nos rodea », eso le enseña a los suyos, pero también lo hace aprovechando la tecnología: para entrar en el nuevo siglo, su comunidad ha implementado una página web con la palabra de los sabedores indígenas.
La música es una de las más hermosas manifestaciones de las comunidades indígenas
Hace más de 50 años en se instalaron en Bogotá los kichwa, ingas y pijaos. Y en la última década también lo hicieron los embera, yanaconas, huitoto, nasa (páez), misak (guambianos), pastos y wayuu, que viven principalmente en bosa, suba y kennedy.
Negros somos
En mayo se celebra la semana de la afrocolombianidad. En sí se conmemoran más de 160 años de abolición legal de la esclavitud en Colombia, se visibiliza su identidad y el aporte del negro a nación nuestra.
La mayoría de los afrobogotanos residen en ciudad bolívar, la candelaria, suba, engativá, kennedy y chapinero, y han llegado de Buenaventura, Tumaco, Chocó y Bolívar. Pero las nuevas generaciones nacieron en Bogotá, por lo que han perdido paulatinamente muchos de sus rasgos típicos.
Afortunadamente, Colombia negra, yambambó, afrovisión, asopacífico, cimarrón y otras organizaciones culturales tantas, se encargan de difundir y velar por los derechos de los afro.
Primos raizales
Dentro del amplio mundo afrocolombiano se diferencian los raizales: los negros nacidos en el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa catalina, con un lenguaje ( criollo ) propios y música ( choti ), y saberes ancestrales que los hacen únicos. Desde el año 2006 celebran la semana raizal, en donde se realizan eventos académicos, culturales, deportivos y gastronómicos que sus exaltan tradiciones.
La organización de residentes raizales en Bogotá se encarga de impartir cursos y talleres de los raizales que viven en la capital, como por ejemplo los de aprender a tocar "quijada de burro»-ese instrumento autóctono, la base del choti, o aprender a preparar una suculento plato de rondón.
Corazón gitano
El origen del pueblo ROM-gitano se remonta hacia el siglo x, en el norte de la india, pero a lo largo de la historia se ha impregnado elementos de multiétnicos y pluri-geográficos en Europa, América y África, continentes que se han untado de «gitanía». Hablan romaní (o romanes), han sido injustamente tildados de vagabundos cuando es fieles hijo realidad, fraternos y amigos de la libertad. En Bogotá, la mayoría de kumpanias (gitanos campos) están en los barrios Galán, San Rafael, Nueva Marsella, la Igualdad, la Primavera, la Francia, Patio Bonito, Pradera, Normandía, Siete de Agosto y las Ferias.
La belleza de las mujeres ROMUna de sus características notables es más que su vida social solo la establecen con personas de su mismo grupo. |
El matrimonio es el evento social más importante en la comunidad ROM:
La mujer es quien cuida de los hijos y el marido, eventualmente trabaja en actividades de quiromancia. Los hombres se dedican a oficios como forja de metales, mecánica y comercio. Aunque su tendencia es la de vivir errantes, ya muchos se han instalado en la capital. Sin embargo, su población en la ciudad es indeterminada y se calcula entre 600 a mil gitanos. Una de sus características notables es más que su vida social solo la establecen con personas de su mismo grupo. Con los «no gitanos» ( gadyes ) establecen vínculos netamente laborales o comerciales, por ésta razón sus costumbres hasta hoy se conservan intactas.
