¡Así cayeron! 11 capturados por homicidio, tráfico de armas y estupefacientes
Según la Policía estas personas controlaban el tráfico de estupefacientes en algunos barrios de Suba, Kennedy, Bosa y Soacha.
Cynthia Vargas Castillo
La Policía Nacional, en coordinación con la Fiscalía General de Nación, desmanteló una estructura criminal conformada por 11 personas, quienes controlaban el tráfico de estupefacientes en algunos barrios de Suba, Kennedy, Bosa y Soacha.
Según informó, a través de arduas investigaciones se logró inferir que esta banda estaría involucrada en varios homicidios relacionados con el expendio de estupefacientes, así mismo sus integrantes modificarían armas traumáticas para posteriormente alquilarlas como armas de fuego.
"El operativo se desarrolló en las ciudades de Bogotá, Manizales y en el municipio de Soacha, donde se lograron materializar las capturas por orden judicial de alias “La Mona” y alias “Muñeca”, cabecillas principales de la estructura criminal, ocho integrantes más, un capturado en flagrancia y una persona más imputada en un centro carcelario", indicó la Policía.
¡Así cayeron!
En el despliegue de esta operación se realizaron 11 diligencias de allanamiento y registro, logrando la incautación de 3 millones de pesos en efectivo, estupefacientes, cartuchos de diferentes calibres, 7 celulares, 7 proveedores para pistola y fusil, 2 armas de fuego tipo pistola, 2 supresores de sonido para pistola, 1 arma de fuego traumática y un 1 cañón para escopeta.
La investigación permitió determinar que la estructura delincuencial trasportaba vía terrestre los estupefacientes desde los departamentos del Cauca y Norte de Santander, hasta la ciudad de Manizales, siendo enviados posteriormente en vehículos particulares acondicionados con sistemas de ocultamiento hacia Soacha y Bogotá; se estima que las rentas criminales de esta estructura corresponden a 200 millones de pesos mensuales.
De acuerdo a lo que se pudo establecer, estos delincuentes, en medio de disputas territoriales por las rentas criminales, empleaban como medio de intimidación métodos de violencia extrema, de hecho, las primeras indagaciones los vincularían con el presunto asesinato de por lo menos 5 personas.
Así mismo, dinamizaban el tráfico, alquiler y acopio de material bélico y la modificación de armas traumáticas para transformarlas en armas letales, para la ejecución de homicidios selectivos y acciones delincuenciales, tanto de esta estructura criminal como de otras, cobrando una suma que oscilaba entre 100 mil y 150 mil pesos por el alquiler de las armas.
Un aspecto importante de las diligencias de allanamiento y registro es que, se logró desmantelar una armería clandestina en donde se modificaba y fabricaba material bélico.
¡Así delinquían!
Alias La mona y alias muñeca, principales cabecillas de esta red criminal, dinamizaban la ejecución de homicidios desde la ciudad de Manizales, donde pretendían pasar desapercibidas, ocultándose de otras estructuras delincuenciales, teniendo en cuenta que las capturadas integraron bandas criminales en Bogotá hace varios años.
Alias Olga, madre de otros dos capturados, lideraba la articulación de este clan familiar con otras estructuras criminales, para la consecución de sustancias estupefacientes y armas de fuego.
Alias Wendy, era la encargada detransportar, armas de fuego y sustancias estupefacientes, desde el municipio de Soacha, hasta la ciudad de Bogotá.
Alias Mario, fungía como el sicario de la red, en tres ocasiones fue capturado por el delito de tráfico de estupefacientes, participó de manera directa en el homicidio de uno de sus integrantes, al que acusaban de trabajar para una estructura contraria y el secuestro de un consumidor de estupefacientes que confundieron con un funcionario de la SIJIN.
Esta estructura delincuencial y criminal, delinquía en las localidades de Suba, Kennedy, Bosa y Soacha, toda vez que algunas de sus integrantes hicieron parte del grupo criminal conocido como Las magolas, además sostuvieron vínculos con el grupo denominado Los camilos, estructura que fue desarticulada en el año 2022, cuando se les responsabilizó de más de 107 homicidios en Bogotá y el municipio de Soacha.
Los capturados son requeridos por los delitos de concierto para delinquir, homicidio agravado, secuestro, fabricación, tráfico y porte de armas de fuego o municiones, tráfico, fabricación o porte de estupefacientes y utilización ilícita de redes de comunicaciones.