¡Aquí sí pasa! Son muchas las historias de vida de las personas que viven, desde hace años, en los inmuebles tipo pagadiarios en Bogotá, mi Ciudad, mi Casa, sobre todo de personas mayores, que se han conocido durante las visitas por parte del equipo de la Estrategia en Pagadiarios de la Secretaría Distrital de Integración Social (SDIS), para su caracterización y visibilización.
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A algunos de estos residentes, además de brindarles la oferta social, han ingresado al programa Ingreso Mínimo Garantizado (IMG) para recibir un auxilio monetario que mejore su calidad de vida.
Dentro de tantas vivencias están las historias de Wilson Díaz, Jorge Eliécer Díaz y Carlos Armando Morales, quienes viven en un mismo pagadiario de la localidad de Chapinero. Este lugar se caracteriza porque sus habitaciones son salones inmensos en los que pernoctan más de 70 personas durmiendo en camarotes.
“Vivo aquí hace 11 años y pago 10 mil pesos para dormir”, asegura, Wilson Díaz Galván, un hombre, de 60 años, de piel morena, que sube las escaleras de este pagadiario con la ayuda de una prótesis que tiene en la pierna izquierda, la cual perdió, según cuenta, en un accidente en un municipio del sur del departamento de Bolívar.
Durante el recorrido, caminaba lentamente hasta el tercer piso de esa casona. En un rincón de ese enorme salón está su cama en la parte baja de un camarote. A un lado tiene una mesa de noche en donde conserva pertenencias personales y los paquetes de bolsas de la basura que vende en la calle, también hay ropa colgada de una de las barandas del camarote. “Aquí se vive tranquilo y está ubicado en un lugar central, lo que me facilita asistir a mis citas médicas”, asegura el hombre que ya fue caracterizado durante las visitas que se hicieron a estos lugares. Mientras posa para la foto manifiesta que, aunque tiene familia, prefiere estar solo para no ser una carga. Agradece a Integración Social por acordarse de ellos y brindarles información y ayuda.
Al otro costado de ese mismo lugar está Jorge Eliécer Díaz, oriundo de Pijao (Quindío) y víctima del conflicto armado. Se gana la vida atendiendo una chaza en la que vende mecato -como él mismo denomina los productos-. Por esta labor, que desarrolla desde las 7:30 de la mañana hasta las 5 de la tarde, le pagan 30 mil pesos.
“Por la cama pago 20 mil pesos y en comida gastó 10 mil. La chaza está en el parque León de Greiff, en la calle 85 con carrera 13. Antes de hacer ese oficio trabajaba en una panadería que está al lado del pagadiario, con lo que ganaba ahí pagaba arriendo en otro lugar, pero cerraron la panadería, quedé desempleado y me vine para este sitio en el que ya llevo 8 años”, cuenta Jorge.
En ese mismo pagadiario vive Carlos Armando Morales. Viste de manera impecable, le sobresale una gorra beisbolera de color rojo que dice “Los Ángeles”. Trabaja como vendedor ambulante con un carrito de helados. “No tenemos nada seguro, lo que ganó en cada heladito es lo que me queda, pero cuando llueve las cosas se ponen difíciles. En esta casa la mayoría nos la rebuscamos en la calle y somos personas mayores. Lo más duro es que si conseguimos para la dormida no tenemos para la comida”, manifiesta.
Carlos habita hace 11 años en este lugar. Sobre la caracterización que le hicieron contó que le preguntaron cómo vivía, cuánto ganaba, cuáles eran sus necesidades básicas y los gastos que tenía, además, si recibía alguna ayuda del Distrito.
“Solo agradecemos que se acuerden de nosotros. Espero poder acceder al Ingreso Mínimo Garantizado para con ese dinero asegurar la dormida. Cuando no puedo trabajar con los helados colaboró en la cocina de este pagadiario y con eso pago la dormida y la comida”, concluye, mientras se dirige a su cama para descansar, pasar la noche y levantarse para sortear un nuevo día.
Estas tres personas ya fueron encuestadas y recibieron algunos servicios de la Secretaría de Integración Social y de la Secretaría Distrital de Salud (SDS) como tamizaje, vacunación, revisión médica, en otros casos, algunas niñas, niños y adolescentes fueron enrutados para lograr un cupo en los jardines infantiles y colegios distritales.
Cifras de la Estrategia en Pagadiarios de la fase 1 y fase 2
- En 2024 fueron caracterizados 268 inmuebles.
- En 2025, preliminarmente van 50 pagadiarios caracterizados.
- En 2024 fueron encuestados 2.426 hogares.
- En 2025, preliminarmente han encuestado 517 hogares.
- En 2024 fueron encuestadas 4.408 personas.
- En 2025, de manera preliminar, van 794 personas encuestadas.
- En 2024, visitaron las localidades de La Candelaria, Los Mártires y Santa Fe.
- En 2025, de manera preliminar, el equipo ha visitado Teusaquillo, Chapinero, Barrios Unidos y Puente Aranda, así como algunos pagadiarios no abordados en 2024 en Santa Fe y Mártires.
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