El 22 de julio, se celebra una fecha crucial para reconocer y valorar el trabajo de cuidado que realizan principalmente las mujeres en los hogares. Desde 1983, este día visibiliza la importancia de estas labores esenciales para la sostenibilidad de la vida y para promover la equidad en su provisión, así como el respeto por los derechos de quienes las desempeñan. Este trabajo es base fundamental de miillones de familias en Bogotá.
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El trabajo de cuidado abarca actividades como la limpieza, lavandería, cocina, mantenimiento del hogar y el cuidado de personas. Estas labores pueden ser remuneradas, cuando son una actividad económica principal, o no remuneradas, realizadas por miembros del hogar sin recibir pago. Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en el mundo hay 75.6 millones de trabajadoras del hogar remuneradas, siendo el 76.2% mujeres. En Colombia, esta cifra asciende al 95%.
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A pesar de su relevancia, el trabajo de cuidado enfrenta serios problemas de reconocimiento y formalización. En Bogotá, el 46% de las mujeres que realizan trabajos de cuidado remunerados, no cotiza a la seguridad social, solo el 34% recibe la prima de servicios, y el 44% gana menos del salario mínimo mensual. Estas condiciones laborales fueron exacerbadas por la pandemia de COVID-19, muchas sufrieron despidos injustos y encierros forzados.
El trabajo de cuidado no remunerado también revela profundas desigualdades de género. Las mujeres dedican en promedio 6 horas y 43 minutos diarios a estas tareas, 4 horas más que los hombres. Esta carga desproporcionada limita su participación en el mercado laboral y perpetúa su dependencia económica y falta de autonomía. En Bogotá, el 38% de las personas considera que las mujeres son mejores para el trabajo de cuidado que los hombres, un reflejo de las creencias culturales arraigadas que perpetúan esta inequidad.
Garantizar los derechos de las personas, en su mayoría mujeres que realizan trabajos de cuidado remunerado, implica abordar diversas dimensiones: condiciones laborales justas, acceso a la salud, vivienda digna, educación equitativa, participación política y una vida libre de violencias.
Bogotá ha tomado pasos significativos en esta dirección, pues es la ciudad pionera en América Latina en la implementación de políticas públicas para la equidad de género y ha desarrollado el Sistema de Cuidado, enfocado en apoyar a quienes cuidan.
Con el Plan Distrital de Desarrollo 'Bogotá Camina Segura', se busca expandir las manzanas de cuidado, fortalecer los servicios existentes y promover una transformación cultural que garantice una distribución equitativa del trabajo de cuidado. Estas acciones no solo buscan mejorar las condiciones de vida de las trabajadoras del hogar, sino también fomentar una sociedad más justa y equitativa.
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El 22 de julio nos invita a reflexionar sobre la importancia del trabajo de cuidado y a tomar medidas concretas para dignificar a quienes lo realizan. Para conocer más sobre este día y las acciones que Bogotá está implementando, visita el documento“22j: Día Internacional del Trabajo del Cuidado al interior de los hogares” haciendo clic aquí.