Ante la propagación del COVID-19 en el mundo, la alcaldesa Claudia López se anticipó e implementó de manera decidida medidas para evitar el contagio en la capital colombiana, lo que cambiaría la vida y la rutina de los ciudadanos quienes debieron cumplir medidas obligatorias para cuidar su vida y la de sus familias.
La primera medida que rigió en Bogotá fue la Alerta Amarilla, decretada el 11 de marzo de 2020. Comprendía tres grandes estrategias para prevenir y atender el contagio: el autocuidado individual, el autocuidado colectivo y la atención médica. “Esta alerta amarilla es con fuerza legal, de obligatorio cumplimiento para el sector público y privado”, anunció la Alcaldesa Mayor.
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— Claudia López 👍 (@ClaudiaLopez) March 11, 2020
La mandataria señaló que el autocuidado no evitaría el contagio pero que si minimizaría su velocidad y facilitaría que la comunidad médica le ganara tiempo a la enfermedad. “El pánico no nos va a cuidar, el autocuidado sí nos va a ayudar. De lavarnos las manos depende reducir un 50% el contagio. De reducir el contacto y de reportar oportunamente los síntomas que podamos tener depende que no colapse el sistema de salud”, explicó. la alcaldesa Claudia López.
Entre las nuevas medidas estaban: una pausa activa cada 3 horas, lavarse las manos con abundante jabón, utilizar alcohol o gel antiséptico, tomar agua, taparse con el codo nariz y boca al estornudar o toser, evitar el contacto directo con las personas, no saludar de beso o de mano, no dar abrazos y evitar asistir a eventos masivos.
Igualmente, cuidar de adultos mayores de 60 años, y en caso de presentar síntomas de alarma (dificultad respiratoria, fiebre de más 38 por más de dos días, silbido en el pecho en niños) llamar a la línea 123 antes de ir al servicio de urgencias.
La alcaldesa solicitó a organizaciones gremiales, empresarios, y sector educativo compromiso para organizar el trabajo en casa de todos los empleados que les fuera posible además de organizar turnos de entrada y salida.
Universidades y colegios debieron implementar la virtualización de clases y actividades a la vez que el distrito ordenó aplazar todo evento público o privado de concentración masiva de más de mil personas, a menos de 2 metros.
Con relación a la atención médica, la alcaldesa Claudia López pidió unir recursos y esfuerzos para organizar equipos de atención domiciliaria en todas las localidades, organizar la entrega a domicilio de medicamentos y que prestadores de servicios de salud públicos y privados hicieran compras conjuntas de tapabocas, gel, alcohol para evitar su desabastecimiento.
La primera gran prueba: el Simulacro Vital
La ciudadanía apenas se estaba acostumbrando a la implementación de las medidas contempladas de la alerta amarilla cuando la alcaldesa Claudia López decretó el primer Simulacro Vital en la Ciudad que duró 4 días, desde el jueves 19 de marzo, a las 11:59 P.M., y hasta las 11:59 P.M. del lunes 23 de marzo.
Se oficializó a través del decreto 090 de marzo de 2020 la restricción a la libre circulación de vehículos y personas y se prohibió el expendio y consumo de bebidas embriagantes en espacios abiertos y establecimientos comerciales.
En esos cuatro días no hubo pico y placa normal ni ambiental y solo pudieron circular los vehículos con excepciones de acuerdo al decreto, quienes no cumplieran las medidas se exponían a sanciones que van desde amonestación, multas económicas y hasta cárcel.
“Queremos reiterarle a toda la ciudadanía que este simulacro no es un puente de vacaciones, no es para irse de paseo. Estamos en un simulacro obligatorio de cuarentena en Bogotá. Tenemos que ser responsables, somos la capital del país y tenemos la obligación de cuidarnos y cuidar a Colombia”, destacó la Alcaldesa.
En los cuatro días el Distrito garantizó el abastecimiento de víveres, alimentos e insumos surtiéndose las diferentes cadenas, supermercados y tiendas de barrio.
Finalmente, el Simulacro Vital decretado por la Alcaldía fue un éxito. La ciudadanía acogió las medidas y por primera vez experimentó lo que más adelante se convertiría en una medida constante.