La Fiscalía General de la Nación identificó y ubicó a cuatro de los posibles articuladores de una organización narcotraficante señalada de sacar cocaína en pequeñas cantidades por el aeropuerto El Dorado de Bogotá con destino a Estados Unidos, México y países de Europa y Asia.
Investigadores del CTI capturaron a estas personas en diligencias realizadas en diferentes puntos de Bogotá. Los elementos de prueba dan cuenta que estarían involucradas en la utilización de los denominados ‘correos humanos’ y de encomiendas para ocultar y mover el estupefaciente al exterior.
En el curso del proceso investigativo en contra de esta red delincuencial fueron identificados 16 eventos distintos, en los que se incautaron más de 124 kilogramos de cocaína y sus derivados en los aeropuertos de Tel Aviv (Israel), París (Francia), Bogotá y Cartagena.
Contenidos relacionados
Por estos hechos, un fiscal de la Dirección Especializada contra el Narcotráfico presentó a los capturados ante un juez de control de garantías y les imputó los delitos de concierto para delinquir; y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.
A continuación, el post en la red X sobre estas capturas.
#ATENCIÓN l La #Fiscalía, a través de la Dirección Especializada contra los Delitos Fiscales, obtuvo importantes resultados investigativos y judiciales en contra de dos de las conductas delictivas que más afectan el patrimonio del Estado. Inicialmente, fueron judicializados tres… pic.twitter.com/YBgYVC8KEd
— Fiscalía Colombia (@FiscaliaCol) October 1, 2023
Los detenidos son:
• Duván Gabriel Lozano Oviedo, alias Chiqui; y Ramiro Alberto Chacua Alean, alias R. Estos dos hombres serían los cabecillas y los responsables de obtener la cocaína. Además, tendrían contactos en El Dorado que les facilitaban el ingreso y tránsito a los viajeros que llevaban la sustancia ilícita escondida en el equipaje o adherida.
• José Ferlein Cano Jiménez, alias Mono; y Willington Raúl Franco Sánchez, alias Negro o Negrito, a quienes se les atribuyen actividades logísticas, la preparación o entrenamiento de los ‘correos humanos’, y el ocultamiento de la cocaína en la mercancía que era enviada como encomienda.
Los procesados no aceptaron los cargos y deberán cumplir media de aseguramiento privativa de la libertad en centro carcelario.