Los niños deben leer por placer, afirma experta en educación

28·DIC·2016
Ana Lúcia Gazzola, ex Secretaria de Educación de Minas Gerais y ex directora del Instituto Internacional de Educación Superior para América Latina y ...

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Ana Lúcia Gazzola, ex Secretaria de Educación de Minas Gerais y ex directora del Instituto Internacional de Educación Superior para América Latina y el Caribe (IESALC), habla sobre la importancia de la oralidad y el papel del docente, la familia y el bibliotecario para cultivar el hábito de la lectura en niñas y niños y los retos de Bogotá para consolidar su Plan de Lectura y Escritura ‘Leer es Volar’.

Los maestros y las familias pueden, de muchas maneras, enamorar a las niñas y niños de las letras, las páginas y los personajes. Así lo describe Ana Lúcia Gazzolla, licenciada en Letras de la Universidad Federal de Minas Gerais, Ph. D. en Literatura Comparada de la Universidad de Carolina del Norte y post-doctorado de la Universidad de Duke.

S.D. E ¿Qué papel juega el docente y la familia en el proceso de crear hábitos de lectura en niños y jóvenes?

El docente es el modelo de lectura, si el docente tiene pasión por la lectura, él o ella va a poder transmitirla a niñas y niños e inspirarlos. Que el profesor lea con los estudiantes o tome una historia y haga que cada uno lea una página, y que participe de ese proceso, es una actividad muy interesante, porque les pasa el sentido colectivo de la experiencia, una pasión compartida.

Pero, aunque el colegio sea el espacio en que eso tiene que ocurrir, no puede ser el único; que los papás y mamás lean, que discutan con los niños, que les pidan que lean algo, es fundamental.

Yo soy profesora de literatura y mi amor por los libros nació con esa actividad de familia. La lectura es buena porque da el punto de convergencia para que la familia pase ese tiempo junta y cree un hábito que puede ser una pequeña tertulia y se dé ese acto de convivir, de hablar, de discutir y de dar opinión. También es importante que donde no hay bibliotecas se creen los rincones de lectura, y que el niño pueda llevar el libro a casa y ojalá pedir que toda la familia lo lea, y luego devolverlo para que otros tengan esa misma oportunidad.

S.D.E ¿Cómo lograr que se incentive la lectura con sentido?

Eso es muy importante, porque la lectura no puede ser una obligación desagradable. El profesor debe saber pedirles a los niños que lean, motivándolos a través de diferentes estrategias para que se sientan empoderados y puedan expresar su opinión acerca de si les gustó o no el libro, con argumentos, compartiendo con sus compañeros, aprendiendo a escuchar a los otros. Una buena estrategia es la que nos compartió un profesor del proyecto Oralidad Lectura y Escritura OLE, que consiste en hacer el rincón de lectura, el placer de leer, el placer de escribir, la fuerza de las palabras, actividades interactivas con las palabras, con lo cual empieza a crear ese gusto en los niños.   

Durante el 2016, Gazzola sumó su experiencia a la construcción del Plan Distrital de Lectura y Escritura ‘Leer es Volar’. Un esfuerzo conjunto las secretarías de Educación y Cultura, Recreación y Deporte, con el que el gobierno ‘Bogotá Mejor para Todos’ se propone promover la lectoescritura como base del aprendizaje, así como disminuir la tasa de analfabetismo en la capital de 2,0 a 1,6 y elevar el índice de libros leídos por habitante de 2,7 a 3,2.

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