El jueves 25 de agosto la guitarrista, bajista y cantante francesa Mathilda Haynes finalmente llegó a Bogotá, después de una gira que la ha llevado por Sevilla (Valle del Cauca) y Pereira (Risaralda), a presentarse en el marco del festival Jazztropicante, un espacio para el intercambio de sonidos colombo-franceses liderado por la directora artística Sara Marechal y apoyado por la embajada de Francia en Colombia, el Instituto Distrital para las Artes (Idartes), entre otros aliados.
Para Haynes, tanto Bogotá como toda Colombia han sido un destino anhelado desde hace ya mucho tiempo, pero no fue sino hasta hace un año que dio inicio a su gira para llegar a este lado del mundo. En ese entonces inició su colaboración con la baterista y cantante colombiana Ana Lucía Muñoz en la pasada edición digital de Jazztropicante.
Hoy, un año después de haber comenzado esta alianza creativa, finalmente ha podido visitar el país y ha sido una experiencia sensacional. “No sé exactamente por qué, pero me enamoré de la música de Colombia, así que cuando Sara Marechal me propuso venir aquí, me volví loca de la emoción”, afirma la francesa.
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Desde su llegada, la experiencia fue memorable pues el mismo día que pisó el suelo bogotano se estaba desarrollando la ceremonia de posesión del nuevo gobierno, desde entonces pudo notar parte de esa naturaleza festiva local.
“Algo muy particular que he descubierto en esta visita es que la música está en todo lado. En la calle no se escuchan solamente géneros modernos como en París, aquí en el taxi o hasta el supermercado puedes escuchar sonidos de todas las regiones del país”, resalta Haynes.
Es justo esa variedad musical la que ha sido el motor para su proyecto creativo con Ana Lucía Muñoz, llamado 'Madera y Piel', pues para ella esta colaboración no es simplemente una alianza entre dos países sino “es más un encuentro entre dos individuos con raíces muy mezcladas por eso mismo dan forma a algo más interesante en este intercambio”.
A continuación, un video del proyecto musical entre Mathilda Haynes y Ana Lucía Muñoz:
Cuando recuerda el inicio de la colaboración, habla con mucha emoción sobre cómo fue surgiendo el tema que compusieron con Muñoz aún a pesar de la barrera lingüística inicial. “Ana Lucía me mandó una base rítmica y yo le puse letras en francés, cuando le pedí su opinión me sorprendió que comprendiera mi intención aún sin entender el lenguaje, así construimos poco a poco la canción”, explica.
Esa primera experiencia de conexión a través del arte y la cultura fue un motivo más para venir a Bogotá y conocer en persona lo que podría surgir al experimentar musicalmente.
“Por cuestiones de tiempo no he podido estar en la capital tanto como quisiera, pero sé que están pasando muchas cosas en términos de música, arte y más. En Bogotá hay una dinámica artística muy fuerte, por ejemplo, está Bomba Estéreo, pero quiero conocer más lo que está sucediendo, por eso quiero regresar más adelante”.
A continuación, una imagen de Mathilda Haynes y Ana Lucía Muñoz en una de las presentaciones del festival Jazztropicante:
La temporada de laboratorios musicales creativos de Jazztropicante acaba este 27 de agosto con una presentación final en el teatro Jorge Eliecer Gaitán en la que participarán Haynes y Muñoz mostrando el intercambio cultural que enmarca su proyecto, pero para la francesa esto no significa el fin de estas relaciones internacionales.
“Tenemos muchas ganas de continuar creando y el siguiente paso será que estos sonidos que estamos formando se presenten también en Francia. Más adelante no sé qué es lo que pasará, pero tengo claro que quiero regresar a Bogotá y darme la oportunidad de conocerla aún más”, concluye Haynes.