En el marco de la segunda edición del Congreso Internacional de Derecho Animal, que se llevó a cabo del 14 al 17 de junio en Bogotá, participaron invitados nacionales e internacionales, entre ellos Silvina Pezzetta, argentina y activista por los derechos de animales, quien en diálogo con Portal Bogotá habló sobre su lucha en una década de trabajo.
Silvina es abogada y doctora en Derecho de la Universidad Nacional de Rosario, Argentina. Es investigadora de CONICET, el Instituto más importante de Argentina y es autora de numerosos artículos sobre derechos de los animales.
Es docente de Ética Animal en la Universidad de Buenos Aires y ha sido conferencista en diversos congresos nacionales e internacionales. Además, fue ganadora de la beca de la fundación Culture & Animals y de la beca Tiny Beams Foundation y se dedica al rescate de palomas en su país.
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PB: ¿Qué opinas de las acciones que hace Bogotá por salvaguardar los derechos de los animales?
Silvana Pezzetta: No conocía todo el trabajo que hace el Instituto de Protección y Bienestar Animal en Bogotá. Me parece importantísimo y, sin dudas, veo a Bogotá como un ejemplo a seguir en la lucha por la protección animal y creo que tenemos mucho que aprender de lo que allí sucede.
PB: ¿Cómo se pueden legalizar los derechos de los animales en las leyes o Constitución de un país?
SP: Existen muchos caminos, algunos se han tomado de manera deliberada, es decir, estrategias de activistas y abogados para, por ejemplo, llevar casos importantes a las Cortes, como fue el caso de Cecilia, una chimpancé en Argentina a la que se declaró como 'persona'; o el caso Chucho en Colombia, un oso de anteojos que no fue considerado como sujeto de derechos, hechos que han servido para entablar la discusión.
Hubo otros casos en los que esa planificación llevó a Argentina a tomar la decisión de reconocer, el año pasado, a un animal que iba se ser traficado ilegalmente, como sujeto de derecho.
Hay casos puntuales donde se estuvo intentando introducir una protección legal, al menos para todos los animales sintientes, o bien, para algunas especies en particular, en diferentes escenarios, por ejemplo, en Chile, donde recientemente se discutió en la Convención de la Constitución, la incorporación de una cláusula de protección animal, que finalmente fue aprobada.
Hay otros intentos de aprobar leyes en distintos países, de distinta naturaleza, en algunos casos reconociendo a los animales como sujetos de derecho y en otros, protegiéndolos de determinadas actividades, lo cual es algo muy positivo.
Portal Bogotá: ¿Desde cuándo estás al frente de la lucha de la protección de los derechos de los animales?
SP: Hace aproximadamente 10 años me interesé por este tema de una forma más bien teórica. Descubrí que era un campo del activismo y de la investigación que estaba ligado al Derecho. Lo que me interesó fue justamente trabajar desde mi lugar que es la Academia.
A continuación, un audio en el que Silvina explica cómo se interesó por el activismo de los animales:
PB: ¿Tienes animales de compañía en casa?
SP: Claro que sí; vivo con una perra que se llama Ema y con una paloma que se llama Filipa.
En la siguiente foto, Silvina Pezzetta con su paloma Filipa a la que rescató de las calles de Buenos Aires y su perra Ema:
PB: ¿Por qué rescatas palomas? ¿Qué tienen de especial?
SP: En muchas ciudades del mundo hay palomas del tipo Columba Livia; estas tienen vidas muy duras, les cuesta mucho sobrevivir, viven poco tiempo, toman agua contaminada y se alimentan de la calle.
Un día encontré una paloma herida en Buenos Aires. Me informé sobre estos animales porque yo tenía mucho miedo. Pensaba que las palomas transmitían enfermedades terribles y que eran un riesgo para la salud. Finalmente, llevé la paloma al veterinario, quien me tranquilizó y me dijo que estas aves no son más peligrosas que un perro o un gato y que requieren los mismos cuidados de un animal maltratado.
Desde ese momento, descubrí todo un mundo interesante de las palomas además, que también son animales domesticados, pues al tener una paloma en la casa es muy similar a tener un perro, ya que son animales que hemos domesticado por siglos para aprovecharnos de sus capacidades, por ejemplo, de su poder de orientación para usarlas como palomas mensajeras.
PB: ¿Qué países de Latinoamérica están más avanzados en leyes de protección a los animales?
SP: Toda Latinoamérica en general, ha producido una interesante jurisprudencia sobre los derechos de los animales, lo que es muy alentador. Tenemos el caso Sandra, una orangutana considerada persona no humana y sujeto de derechos en Argentina; los casos de Coco, un mono que fue rescatado en tráfico de fauna y Chucho en Colombia, que ya nombré.
Por otro lado, recientemente, Colombia ha declarado inconstitucional la pesca deportiva; el primer país del mundo en considerarla como maltrato animal, un gran avance.
En general, ningún país latinoamericano ha declarado una ley robusta y sólida, pero ha tomado pasos muy interesantes respecto a la consideración de los animales como sujetos y no como objetos.
PB: ¿Cómo se hace para cambiar la idea de que los animales son sujetos de derecho y no objetos?
SP: El trabajo en distintos terrenos es fundamental, es decir, un trabajo que lleve a traducir las ideas de que los animales no pueden ser considerados cosas. Por ejemplo, el trabajo que hacemos en las universidades, dictando cursos, haciendo investigación, editando documentos y libros, es primordial. También desde el periodismo y de la comunicación responsable, donde se muestre a los animales como seres sintientes y no como cosas.
PB: ¿Se puede ser omnívoro y estar en contra del maltrato animal?
SP: Omnívoro es una condición biológica, así que mejor sería mostrar que, comer de todo y comer animales es una elección.
Estamos acostumbrados a referenciar a las personas que no comen animales como veganas o vegetarianas. Pero las personas que eligen comer animales lo hacen porque son omnívoros, es decir, todos somos, pero la mejor manera de llamarlos sería carnistas.
Me parece que hay una contradicción muy importante, porque nadie en realidad está a favor de la violencia contra los animales, incluso hay personas que comen carne, pero encuentran justificaciones muy débiles para seguir consumiendo.
PB: ¿Cómo está Bogotá y Colombia en materia de protección a derechos de animales; va por buen camino?
Siempre miro a Colombia con mucho interés, porque su Corte Constitucional es muy respetada. Aunque el caso Chucho no lo esperábamos, me parece que Colombia tiene mucho activismo y personas trabajando en el área.
Siempre sigo lo que hace Andrea Padilla, concejala bogotana y activista por los animales. Me parece que Colombia tiene mucho para aportar. Además, este Congreso, al que estoy invitada, es una muestra muy interesante de lo que Colombia es capaz de dar; no solo Colombia, sino toda Latinoamérica.
Aquí, una imagen de Silvina Pezzetta en su intervención en el II Congreso de Derecho Animal y en donde habló sobre la jurisprudencia latinoamericana en derecho animal y sus aportes en la construcción del reconocimiento de los animales como sujetos de derecho:
