La calle 16 con carrera 8a, en el centro de Bogotá, se ha convertido con el paso de los años, en un lugar representativo para algunos bogotanos, por ser un punto de referencia para la compra de libros, tanto nuevos como usados. En esta zona se encuentra el callejón de los libreros que ha logrado sobrevivir a pesar de la virtualidad y la pandemia, ya que aunque muchas personas migraron a la lectura digital, gran cantidad de personas sigue acudiendo a este sector a comprar sus libros.
La historia viene desde los años 90 aproximadamente, época que transformó y reubico en esta zona a la mayoría de vendedores que se encontraban en ese entonces sobre la Avenida 19, vendiendo en casetas metálicas, música, casetes, vinilos pero sobre todo variedad de libros.
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FOTO: Alcaldía Mayor de Bogotá
Sobre la carrera 8a, por el paso peatonal, se encuentra el Centro Cultural del Libro, un edificio que por más de 20 años se ha convertido en un espacio representativo para la venta, compra e intercambio de textos en Bogotá, por contar con una amplia e infinita gama de libros de todas las categorías y precios.
“Afuera usted consigue libros entre veinte y treinta mil pesos, aquí buscando puede encontrar ese mismo en diez mil” comenta, Arturo Morales, comerciante del sector.
Saliendo del Centro Cultural, la zona es sin duda propiedad de los libros, que se toman desde tempranas horas el espacio dando una esencia especial al sector. Por el paso peatonal y en los locales comerciales empiezan a verse los textos que se ponen a disposición de los lectores, sus principales visitantes, que buscan todos los títulos desde antiguos a nuevos.
FOTO: Alcaldía Mayor de Bogotá
Las librerías que se encuentran por esta calle son tantas, que escoger una en especifico, es un golpe instintivo o incluso de suerte.
Frente al Centro Cultural, por el primer callejón en el local del fondo, se encuentra Alejandro Ocampo, un sociólogo de la Universidad Nacional, que en el año 2005 tomó la decisión de abrir su librería, conocida como ‘Árbol de Tinta’, nombre que le gusto de una revista mexicana de los años 30 y lo tomó para bautizar así el lugar.
“Primero trabajé aquí mismo en la librería Merlín, durante cinco años, y luego simplemente pues abrí la mía, descubrí que ese era mi oficio y me quedé”, asegura, Alejandro Ocampo.
FOTO: Alcaldía Mayor de Bogotá
El oficio que desempeña Alejandro, no es de un vendedor de libros, su oficio es ser un librero, “profesión” que ha construido con el tiempo y lo ha ayudado a conocer a sus clientes, ofrecer libros, contar historias y dar consejos literarios para que las personas puedan escoger un buen libro, según sus preferencias.
Labor que ha impulsado a Alejandro y a su librería a ser uno de los lugares escogidos por los compradores del sector, pues trabajar en una zona con tanta variedad del mismo mercado comercial, pone algunos retos a los dueños de las librerías por ofrecer un atractivo para que el cliente tome la decisión de estar en ese lugar.
Alejandro empezó con su librería en un local pequeño, pero en el 2009 por sus buenas ventas abrió dos locales ampliando su espacio y el de sus libros.
En la librería ‘Árbol de Tinta’ se pueden encontrar textos con especialidades en: Literatura, Filosofía, Sociología, Antropología, Artes, entre otras.
El espacio está dividido por categorías para que los clientes puedan encontrar más fácilmente los textos, ensayos o libros teóricos que buscan. Así como también tienen un solo mueble que es dedicado a libros de la historia de Colombia.
FOTO: Alcaldía Mayor de Bogotá
La llegada de la pandemia, afectó en diversas formas al sector, pero para Alejandro fue un impulso en sus ventas, pues desde el año 2014 por medio de sus redes sociales ya había emprendido el servicio de ventas a domicilio y el cierre preventivo de su librería ayudó a que sus ventas fueran mayores en redes sociales.
“Nosotros veníamos trabajando en comercio electrónico desde el 2014 entonces no representó sino un cambio en la cantidad de despachos”, asegura, Alejandro.
Por más de 15 años, Alejandro se ha apasionado por su labor y busca transmitir este sentimiento en cada visitante de su librería, para él es muy difícil escoger un libro o texto como su favorito, pues entre tantos siente que los conoce a todos y que cada uno de estos ha dejado una enseñanza en él.
Aún así nos deja la recomendación de una de sus novelas favoritas que se encuentra dentro de su lista.
Si aún no conoces estas calles y librerías te invitamos a darte un paseo por el sector como comprador o simplemente observador, para que te encuentres con el característico olor que los libros dejan en este lugar.