La sesión de este miércoles de #LeerParaLaVida, que organiza la Secretaría de Cultura Recreación y Deporte de la capital, tuvo como invitada a la escritora y poetisa colombiana Piedad Bonnett. Quien, acompañada del secretario de Cultura de Bogotá, Nicolás Montero, compartió algunas de sus experiencias más relevantes de acercamiento con las historias, la fantasía, la literatura y, finalmente, su llegada a la poesía.
“Los niños leíamos cosas que no eran políticamente correctas. Eso fue un estímulo muy importante porque yo entré a la literatura por mundos fantásticos, cosas extrañas que no entendía, pero la sonoridad de las palabras y de las letras me fascinaba”, recordó la escritora quien también reveló que fue su mamá quien le enseñó a leer y quien, por su espíritu de maestra, les compartió a ella y a sus hermanos el amor por lo literario.
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Durante la sesión, en la que tanto Montero como Bonnet cuestionaron la realidad y la fantasía que puede tener la memoria, la invitada resaltó la importancia de las palabras para la construcción del mundo en el que vivimos, que recordamos y, sobre todo, para la educación.
“Si los niños aprenden desde chiquitos esas palabras que dicen cosas raras, se aprende a jugar con las palabras. Ese juego lleva a ser capaces de imaginar, de crear”, de igual forma la poetisa recordó que, “algunos de mis estudiantes no se podían desprender de la rigidez del racionamiento. No podían desordenar el lenguaje, que es inherente a la poesía. Eso se da porque hay una sobrevaloración del pensamiento racional y una subvaloración del pensamiento analógico”.
A lo largo de la sesión, en la que se destacaron elementos literarios como la sonoridad, el ritmo y los significados de las palabras, el secretario Montero le preguntó a la invitada: ¿Leer es una especie de ensayo de la vida? A lo que ella respondió refiriéndose al reconocido texto La Insoportable Levedad del Ser, del escritor checo Milan Kundera:
“La insoportable levedad empieza así, diciendo que lo terrible de la vida es que siempre la vivimos en borrador. No tenemos la posibilidad de reescribirla. Lo maravilloso del libro es que dinamiza el pensamiento. Eso es algo que, quizás, solo una extraordinaria conversación con alguien muy lúcido podría suceder”, y agregó: “La literatura ilumina lo impenetrable del mundo. Te señala que hay una parte del mundo a nunca puedes llegar”.
Las sesiones de #LeerParaLaVida reúnen a diferentes personalidades de la ciudad y el país para compartir experiencias sobre la lectura. Además, para encontrar puntos que permitan dar una definición sobre la lectura, por eso la invitada lanzó su definición así:
“Leer para la vida es no estar buscando, sino estar dispuesto a encontrar. Estar abierto a lo que los libros te dan, para incorporarlo en la vida en el momento que la lectura llega”.