Chela y Dastan, son los dos perros guías caninos que en este momento se encuentran en Haití acompañando al grupo de 25 bomberos de Bogotá que viajó a ese país para apoyar en las labores de rescate de personas atrapadas en las estructuras colapsadas, tras el sismo ocurrido el pasado 14 de agosto.
El sargento Roger Peña, líder del grupo Grupo de Búsqueda y Rescate de Animales en Emergencias – BRAE, habló con Portal Bogotá y cuenta que Chela y Dastan son perros de raza Pastor Belga Malinois, traídos desde España hace aproximadamente año y medio cuando se cambiaron los caninos de los Bomberos de Bogotá que ya llevaban más de 10 años.
"Entraron a formar la lista de la especialidad de búsqueda en estructuras colapsadas, son perros que recibieron un curso de 15 días continuo, hace unos 3 meses en el que recibieron una certificación internacional de una organización de emergencias de Francia", dijo el Sargento Roger Peña.
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Los dos canes, son jóvenes en edad, pues apenas tienen dos años, pero son lo debidamente entrenados por los bomberos para hacer frente a las situaciones de riesgo en las que deban salvar vidas.
Según el sargento Roger Peña, estos perros han sido capacitados, desde hace más o menos un año, en rescates con un entrenamiento basado en metodología española.
Así es como los bomberos de Bogotá entrenan a sus perros 👇:
Chela y Dastan pertenecen también, al componente de búsqueda del equipo Col 1 de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo en la eventualidad de rescates que se requieran.
"Son perros muy sociables, son perros muy jóvenes que tienen todo su potencial en este momento para esa actividad que la búsqueda de personas con vida en cualquier situación, entonces son perros en los que se puede confiar por su instinto y sus capacidades en cuanto a búsqueda se refiere", aseguró el sargento Roger Peña.
Señala que Chela es una perra muy amorosa, equilibrada y sociable que "Tiene una concentración y una agilidad increíble con la que hace una labor muy buena, con características no solo de compañera en el trabajo sino como compañía", explicó el sargento Peña.
Asegura que los dos perros se han convertido en parte importante del grupo de bomberos rescatistas porque allí se convierten en un bombero más que debe enfrentar los riesgos con valentía y heroísmo. "Los perros recibieron el curso donde fueron entrenados en varios escenarios que los pusieron a prueba: la capacidad olfativa del perro, su seguridad frente a la búsqueda, su manera de enfrentar terrenos adversos, la permanencia en los sitios de trabajo, fueron varias pruebas entre las que se manejó también la obediencia básica del perro para un control sobre el animal", dijo el sargento Roger Peña.
El sargento Roger asegura que para que los perros realicen este tipo de labores deben estar muy bien alimentados y cuidados.
"Tener un perro de estos es una responsabilidad que se adquiere muy alta, porque se vuelve un compañero de trabajo, es una responsabilidad tanto en el cuidado como en el entrenamiento y es allí donde se crea un vínculo afectivo entre el bombero y el perro", finalizó.
