Cerca de 460 ciudadanos venezolanos fueron reubicados por la administración del alcalde Enrique Peñalosa a un campamento humanitario transitorio ubicado en la localidad de Engativá, en el centro de atención El Camino, el cual operará hasta enero de 2019.
En este centro ha funcionado un hogar de paso para atender a población habitante de calle sin ningún problema. El secretario General, Raúl Buitrago, asegura que es un proceso que se está haciendo con toda la seriedad y todas las garantías.
“El campamento de paso tiene capacidad para 500 personas donde podrán estar en condiciones dignas. Vamos a garantizar la sana convivencia. Además de tener un mejor control sobre las ayudas humanitarias, también va a permitir que conozcan la oferta institucional de las distintas secretarias”, agregó Buitrago.
Para esta reubicación los migrantes venezolanos debieron aceptar un manual de convivencia y comprometerse con su cumplimiento. Así lo aseguró la secretaria Social, Cristina Vélez.
“Hemos hablado con los migrantes para dar a conocer este reglamento. Estamos y han manifestado su compromiso de cumplimiento. Seguiremos trabajando en la Administración de Enrique Peñalosa para garantizar la armónica convivencia entre la población migrante y los habitantes de nuestra ciudad”, destacó Vélez.
Así mismo, la funcionaria anunció que se realizarán diferentes tipos de actividades para garantizar la sana convivencia, al igual que se han adelantado reuniones con los vecinos del sector para dar un parte de tranquilidad sobre este proceso.
En este grupo se identificaron 67 menores de edad y 26 menores de 6 años, por lo cual se habilitaron 40 cupos en jardines infantiles para atender a estos pequeños durante el tiempo de estadía que será máximo hasta enero del año entrante.
Por su parte, Felipe Muñoz, gerente para la frontera de Venezuela del Gobierno Nacional, destacó que Bogotá ha sido la ciudad más generosa en términos de recepción de víctimas del conflicto y desplazados.
“Según cifras de migración Colombia hay más de un millón de ciudadanos venezolanos permanentes en Colombia, de los cuales el 23 por ciento se encuentra en Bogotá, ciudad con el mayor de ciudadanos que cuentan con el permiso especial de permanencia, casi 113.000, los cuales tienen acceso a la salud, educación y pueden trabajar”, resaltó Muñoz.
Ahora, estos ciudadanos pasaron de convivir de forma indigna en ‘cambuches’ improvisados a una situación digna y respetuosa de los derechos humanos, mientras se garantiza su inclusión a la sociedad colombiana.
Como paises hermanos debemos ayudar a los Venezolanos porque #SonNuestrosPanas
— Secretaría Social (@integracionbta) 13 de noviembre de 2018
Hoy 470 hermanos venezolanos pasaron de vivir en la intemperie y con un futuro incierto, a tener un lugar digno donde pasar los días con calidad y calidez. pic.twitter.com/GfW1vAiXBB