La Montaña del Oso, un lugar para descubrir en Usaquén

29·AGO·2013
Entre los programas de ambiente que actualmente lidera la Alcaldía Local de Usaquén, a través de su Plan de Desarrollo Local, se encuentra el de descubr...

Únete a nuestro canal de noticias en WhatsApp

Entre los programas de ambiente que actualmente lidera la Alcaldía Local de Usaquén, a través de su Plan de Desarrollo Local, se encuentra el de descubrir la Montaña del Oso.

El proyecto será dirigido a estudiantes de colegios públicos de la localidad que preferiblemente tengan en su institución un Proyecto Ambiental Escolar (PRAE) establecido.

Las caminatas tendrían una duración de cinco horas, contarán con un guía especializado, refrigerios, transporte y el apoyo de un equipo en caso de emergencias.

Estas caminatas estarían programadas para el mes de septiembre de 2013 y se verían beneficiados grupos de 20 estudiantes de colegios como el Friedrich Naumann, Aquileo Parra, Colegio Usaquén, Saludcoop sede A y B, Colegio Comunal las Orquídeas, Cristóbal Colón sede A y B y Agustín Fernández.

Sobre  la Montaña del Oso:

Aparentemente la localidad de Usaquén acaba al norte cuando se encuentra con Chía y Sopó, lo que no saben muchos es que allí, entre las montañas donde nace el río Torca, se encuentra la Montaña del Oso.

Ya no habitan este tipo de mamíferos entre la humedad del bosque, pero los residentes de la zona como Hernando Poveda, cuentan que “hace más de 40 años se alcanzó a ver alguna especie, pero se fue extinguiendo por los cambios que trajo el aprovechamiento del suelo y por eso quedó con ese nombre”.

Para llegar a este sitio desconocido por muchos de la localidad, solo hay que atravesar la Autopista Norte e ingresar por Chía para devolverse un poco y estar de nuevo entre las montañas de Usaquén.

Los visitantes se encontrarán con un camino natural en el que el sonido de pájaros, árboles nativos como Encenillo, Gaque, Arrayán y mariposas de colores, dan la bienvenida a un paraíso natural que ha logrado sobrevivir a quemadores de leña que fueron acabando con el bosque.

Al seguir el camino entre el páramo característico de la sabana, los visitantes conocerán el Valle del Silencio. Este es un parque de más de 10 frailejones que son parte de la base del páramo andino, y como su nombre lo dice es un espacio donde los caminantes podrán tener un espacio para alejarse de la ciudad ruidosa.