Pacto social, reconciliación democrática y programa de desarrollo con enfoque territorial fueron algunos de los temas que se destacaron en el foro virtual ‘La paz en emergencia: avances y retos del Acuerdo en tiempos de pandemia’, promovido por la Alta Consejería para los Derechos de las Víctimas, la Paz y la Reconciliación.
Durante el foro virtual, al que asistieron congresistas, representantes de organismos internacionales, miembros de la Comisión de la Verdad y organizaciones sociales, se habló de hacer un diagnóstico sobre la implementación y los retos que se afrontan en las actuales circunstancias.
“Estamos comprometidos con mantener y fortalecer los derechos de las víctimas en medio de la pandemia. Una de las metas que tenemos es cumplir la promesa de cerrar la brecha entre lo rural y lo urbano a través del PDET del Sumapaz y de los límites entre Bosa y Soacha”, dijo el alto consejero para los Derechos de las Víctimas, la Paz y la Reconciliación, Vladimir Rodríguez Valencia.
Por su parte, el senador Iván Cepeda, defensor de Derechos Humanos y facilitador de acuerdos de paz, destacó la propuesta que hace la Alcaldía Mayor de Bogotá por sus componentes novedosos y de implementación a fondo del acuerdo, como la inclusión de programas de desarrollo con enfoque territorial (PDET) y las diferentes propuestas para el municipio de Sumapaz.
"El concepto de reconciliación democrática, no consiste simplemente en buscar una nueva relación entre las víctimas y los victimarios, sino un proceso de reconciliación entorno a un pacto social, que implica unas acciones concretas para eliminar la exclusión social, la pobreza, la injusticia, las desigualdades y la discriminación de todo orden”, dijo Cepeda.
Por su parte, el senador y líder nasa Feliciano Valencia realizo hizo un balance de la población indígena que vive en Bogotá, destacando a los desplazados, quienes adelantan su formación académica y están radicados de manera organizada.
“Hay 19 cabildos organizados los cuales agrupan la mayoría de la población indígena que habita Bogotá. Estas autoridades indígenas y estas organizaciones deben ser incluidas a los debates del Plan Distrital de Desarrollo y a la elaboración de los POT, porque hay muchos cabildos que quieren que se les reconozcan sus territorios y no han podido”, explicó Valencia.
Estos son los temas que se trataron en el foro:
El Covid-19 y la implementación del Acuerdo
Carlos Ruíz Massieu, representante especial del Secretario General de la ONU en Colombia y jefe de la Misión de Verificación del Acuerdo, señaló que “reconocemos que, en medio de los desafíos de la pandemia, hemos observado flexibilidad, solidaridad y empeño de diferentes sectores u gran ejemplo de esto es la reorientación de varios proyectos de reincorporación de las Farc de carácter textil hacia confección de tapabocas. Muestra readaptación, voluntad y sobre todo solidaridad. No solamente confluyen los excombatientes, sino otros sectores que apoyan este tipo de iniciativas”.
Además, destacó la voluntad que tiene Bogotá para tener elementos del Acuerdo de Paz en el Plan de Desarrollo y la promesa de Bogotá-Región como epicentro de paz.
El diplomático reiteró el apoyo de la ONU y señaló que “la paz en Colombia no puede de ninguna manera ser una víctima más de la pandemia”.
La importancia del PDET
La representante a la Cámara Juanita Goebertus, también participó en el foro y planteó que “las entidades territoriales deberían dar pasos para incorporar el enfoque PDET. Bogotá, tiene la capacidad institucional y ha tenido el músculo económico para dar el ejemplo de empezar a incorporar ese enfoque que implica tener una lupa territorial, garantizar la participación y tener una mirada integral”.
A su turno, Elena Ambrosi, quien hizo parte del equipo negociador en La Habana y es procuradora delegada para el seguimiento al Acuerdo de Paz, planteó que Bogotá debería constituir el Consejo Territorial de Paz y el Consejo Territorial de Reincorporación.
“Es innovadora la apuesta de la Alcaldía Mayor de Bogotá por el PDET en la localidad de Sumapaz. Es importante que se tengan en cuenta las enormes lecciones aprendidas en la construcción de los PDET a nivel nacional”, puntualizó.
Paula Gaviria, directora de COMPAZ, manifestó que el Acuerdo Final “es una oportunidad para lograr las soluciones duraderas para la población en situación del desplazamiento, que representan entre el 86 y 89% de las víctimas, incluso en Bogotá y muy importante PDET Bosa-Soacha, ya que la población desplazada se encuentra fundamentalmente allí”.
Por su parte, Marco Romero, director de Codhes, destacó que “la Alcaldía de Bogotá haya hecho una apuesta por crear un PDET para Sumapaz y otro para Bogotá-Soacha, porque es la concepción que no solo responde a la naturaleza del Acuerdo, sino a la Constitución”.
De otro lado, Jesica Faieta, representante del PNUD en Colombia, indicó que “Bogotá tiene un recorrido muy grande porque tiene infraestructura e institucionalidad alrededor del trabajo con víctimas, como es la Consejería”. Señaló que es “un punto seguro de encuentro para las víctimas, porque aquí en Bogotá pueden acceder con más facilidad a la oferta del Estado”.