Con tan solo 10 días de nacido, Luis Ángel tuvo que ingresar al quirófano donde le realizarían un complejo procedimiento para salvar su vida. Este pequeño padece una extraña enfermedad llamada síndrome de Pierre-Robin, la cual hace que su mandíbula sea más pequeña de lo normal y que su lengua, replegada en la garganta, le impida comer y respirar con normalidad. Por esta razón este requirió una intubación de urgencia para sobrevivir.
“Cuando él nació, los doctores me dijeron que tenía una malformación en su rostro y debía ser internado en la UCI Neonatal de inmediato porque la situación ponía en riesgo su vida; fue un momento demasiado difícil”, aseguró Jessica Andrea, una mujer trabajadora que agradece el trabajo dedicado del equipo médico para salvar a su hijo.
El caso de Luis Ángel llegó al doctor Andrés Duque, cirujano cráneomaxilofacial pediátrico del Hospital Meissen, quien, junto con un equipo de especialistas, realizó la operación.
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“La cirugía consistió en colocar dos dispositivos llamados distractores mandibulares, los cuales se van expandiendo todos los días alargando la mandíbula y permitiendo que la vía aérea se expanda para que el niño pueda respirar adecuadamente", dijo el especialista, ilustrando el procedimiento que permitió devolverle la calidad de vida al joven paciente; pues según explicó, la otra opción hubiera sido una traquestomía, la cual se usa de manera permanente desmejorando la calidad de vida y manteniendo la malformación en el rostro.
Horas extenuantes fueron invertidas por los profesionales del hospital para tratar de devolverle la salud y la oportunidad de vivir una vida digna a este pequeño. Al finalizar la intervención, el doctor Duque pudo notificar a la familia: el procedimiento se realizó exitosamente y Luis Ángel pasaría a recuperación bajo estricto cuidado del equipo de enfermería y pediatría. Allí se sobrepuso y pudo salir a casa para terminar el proceso.
Hospital de Meissen: un referente internacional en el manejo de malformaciones craneomaxilofaciales.
“El hospital Meissen es un centro de referencia a nivel nacional e internacional en cuanto al servicio de cirugía craneomaxilofacial pediátrica, hemos sido convocados internacionalmente porque nuestra experiencia y nuestras técnicas están en un alto nivel. La guía para el manejo de malformaciones craneofaciales para Bogotá fue elaborada por este equipo de trabajo”, afirmó el doctor Duque, refiriéndose a los 12 años de experiencia que, según él, han pasado sin ningún tipo de percances con un manejo ético y profesional ejemplares por parte del equipo de profesionales de la institución.
Actualmente, Luis Ángel se está recuperando en casa junto a su familia y ya puede respirar y comer con normalidad. Sus padres agradecen a los profesionales de la Subred Sur por haber salvado la vida de su hijo y devolverles a todos la felicidad y la esperanza:
“Estamos agradecidos con todos los profesionales que atendieron a nuestro bebé: enfermeras, médicos pediatras, el cirujano... fue la mejor de las atenciones. Luis Ángel recibió el mejor tratamiento en el momento de la cirugía, en la hospitalización y en la recuperación” expresó Jessica, quien ahora espera 20 años más de cuidado y monitoreo de esta enfermedad junto a su hijo. Reto que, a pesar de lo largo y dispendioso que puede llegar a ser, será asumido con más tranquilidad y con la seguridad de que él tendrá una mejor calidad de vida, pasando su niñez y juventud con normalidad.
