¡Aquí sí pasa! En Bogotá, mi Ciudad, mi Casa cuidamos el medio ambiente y restauramos la cobertura vegetal. 11 jardines con plantas, árboles y arbustos hacen parte de las zonas verdes bajo los puentes vehiculares de la avenida Boyacá con calle 127 con avenida el Rincón-Tabor en la localidad de Suba. En la zona fueron ubicadas plantas y enredaderas en 11 columnas de tres puentes que se convirtieron en jardines biodiversos que suman un área de 124,9 metros cuadrados.
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En marzo de 2025 y luego de seis años en obra, la Alcaldía Mayor de Bogotá inauguró los nuevos puentes de la calle 127, avenida Boyacá y avenida El Rincón-Tabor, una megaobra que hace parte de un proyecto de valorización.
El Instituto de Desarrollo Urbano (IDU), entidad encargada de la obra, también construyó varios separadores, senderos peatonales, 2,1 kilómetros de ciclorruta, 54.000 metros cuadrados de jardines y un moderno gimnasio.
En el muro de contención de la calle 127 con Boyacá, los artistas del colectivo Trazos de Colores Urbanos le dieron vida a un mural de 3.800 metros cuadrados llamado 'Guardianes del páramo', donde pintaron un oso de anteojos, un colibrí chivito y varios frailejones.
Bajo estos tres nuevos puentes vehiculares, el Jardín Botánico de Bogotá José Celestino Mutis (JBB) y el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) pusieron en marcha el segundo proyecto de jardinería urbana en la ciudad: “Columnas verdes”, que busca integrar la naturaleza en los proyectos de infraestructura.
“Este proyecto es pionero en entornos netamente urbanos. Mezcla la técnica tradicional de la jardinería con la de los muros verdes y busca mejorar la conectividad ecológica y beneficiar a los polinizadores”, dijo María Claudia García, directora del Jardín Botánico de Bogotá.
Diana Castro, ingeniera agrónoma del equipo de jardinería del Jardín Botánico, fue la encargada de liderar la transformación de las 11 columnas de estos puentes, que abarcan un área de 124,9 metros cuadrados, en jardines biodiversos.
Para estas nuevas coberturas vegetales, la profesional escogió 11 especies: manto de María, capuchina, algodoncillo, salvia bogotana, salvia del Sumapaz, salvia granadina (microphylla), chinchimaní, suelda con suelda morada, anredera, cinta liriope y pasifloras.
Diana, que también lideró el primer proyecto de jardinería urbana del Jardín Botánico de Bogotá José Celestino Mutis (JBB) y el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) en el puente curvo de la avenida 68 con calle 26, aseguró que siete de estas especies son nativas del continente americano.
“Para las columnas de los tres puentes de la Boyacá con 127 seleccionamos varias especies que no hicieron parte del primer proyecto. Esto se debe a que la zona presenta condiciones de luz, viento y contaminación diferentes”.
Durante la última semana de octubre y la primera de noviembre, la ingeniera agrónoma y su cuadrilla de ocho operarios trabajaron largas jornadas para convertir las grises columnas en jardines biodiversos y polinizadores.
“El Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) instaló mallas plásticas de dos metros de alto en las columnas para que las especies enredaderas puedan treparse. También nos ayudó con la adecuación de suelo y nos suministró la tierra abonada”.
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1.279 plantas de 11 especies conforman esta nueva cobertura vegetal: 94 mantos de María, 66 capuchinas, 74 anrederas, 97 algodoncillos, 41 salvias granadina, 41 chinchimanís, 137 sueldas con sueldas, 44 salvias bogotanas, 247 salvias de Sumapaz, 416 cintas y 22 pasifloras.
Mientras realizaban la intervención, Diana y los operarios Juan Pablo Beltrán, Carlos González, José Valencia, Ligia Cepeda, Heliberto Tombe, Brigitte Guzmán, María Medellín y Adelmo Pulido, recibieron felicitaciones por parte de los transeúntes y usuarios del moderno gimnasio.
José González, habitante del barrio Niza, les informó que los 11 nuevos jardines biodiversos creados en las columnas de los tres puentes vehiculares ya están atrayendo a varios polinizadores.
“He visto abejas y mariposas en medio de las flores. Estos nuevos jardines le servirán como refugio y alimento a la fauna de este sector ubicado a pocos metros del humedal Córdoba, la esponja hídrica con mayor cantidad de especies de aves en Bogotá”.
Cada dos semanas, Diana visita los tres puentes de la avenida Boyacá con calle 127 para regar con un carrotanque las 1.279 plantas de los jardines biodiversos. En esas jornadas de riego, la ingeniera revisa meticulosamente su estado.
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“He identificado dos problemáticas en el sector: el alto flujo de camiones que arrojan una gran cantidad de contaminantes y los motociclistas que utilizan los jardines como orinales; varias plantas no han sobrevivido a estos impactos”.
La profesional concluyó que estos nuevos jardines servirán como un proyecto de investigación. “Es la primera vez que se plantan este tipo de especies en puentes. Vamos a documentar cómo se comportan en una zona con un alto flujo vehicular”.
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